SANTIAGO DE COMPOSTELA, 24 Oct. (EUROPA PRESS) -
La escasez de lluvias que ha registrado Galicia en la última semana todavía no se refleja en los registros hidráulicos, que permanecen muy por debajo de la media de la última década en el caso de la cuenca más grande gallega y con respecto al registro de 2016.
Según los datos difundidos este martes por el Ministerio de Agricultura y Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, la cuenca Miño-Sil se sitúa al 40,2% de su capacidad, cuando en 2016 se encontraba al 51,84%.
Esto significa que, de los 3.030 hectómetros cúbicos de capacidad de la cuenca, a estas alturas del año están embalsados 1.218 hectómetros cúbicos, frente a los 1.571 del año pasado (52%) y los 1.621 de media de los últimos diez años (53,5% de la capacidad).
Por su parte, los embalses de Galicia Costa están al 48,2% de su capacidad, con 330 hectómetros cúbicos embalsados. A estas alturas del año, los embalses contaban con 377 hectómetros cúbicos, el 55,1% de su capacidad. En este caso, la media de los últimos diez años es ligeramente inferior, ya que esta es de 364 hectómetros cúbicos.
Aunque los embalses gallegos se encuentran por encima de la media española en cuanto a agua embalsada, ya que la reserva hidráulica total es del 37,8%, se ve superada en porcentaje por las cuencas del Ebro (42,8%); cuencas internas de Cataluña (53,9%); la del Tinto, Odiel y Piedras (68,6%); cuencas internas del País Vasco (52,4%) y todo el Cantábrico (67,1% y 54,1%).