PONTEVEDRA, 24 May. (EUROPA PRESS) -
Las labores de desescombro tras la explosión de un lugar donde se almacenaba de forma irregular material pirotécnico en el municipio pontevedrés de Tui se han retomado en la mañana de este jueves con la incorporación de perros de rescate y con la "máxima prioridad" de buscar posibles víctimas, en especial "ese posible desaparecido".
Así lo ha informado la Vicepresidencia de la Xunta, que ha puntualizado que, hasta el momento, hay una personal fallecida y otra posible desaparecida. Además, ha concretado que de los 30 heridos, siete de ellos son menores y "ninguno corre riesgo su vida".
Vicepresidencia de la Xunta ha indicado que la autoridad judicial determinó que el lugar "no era seguro para los grupos de intervención", por lo que durante la noche "quedaron cuatro dotaciones de bomberos que se dedicaron a extinguir posibles focos".
Al respecto, la Xunta ha explicado que todos los focos "fueron de poca relevancia", salvo uno "que fue mayor" y requirió de una nodriza para dotar de agua a los bomberos.
Agentes de la Guardia Civil y Policía Nacional, ayudados por Protección Civil, mantuvieron la seguridad en la zona, donde intervinieron 240 efectivos de emergencias y docenas de agentes de Policía Nacional, Guardia Civil, Autonómica y Local.
Los vecinos que perdieron las casas fueron realojados en hoteles y "reciben asistencia y apoyo", ha subrayado la Vicepresidencia de la Xunta. Además, Cruz Roja mantuvo un dispositivo de albergue en la zona, que ha prestado asistencia a cinco de los 30 evacuados.
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