Subdelegado en Pontevedra insta a la Xunta a que "se ponga a los mandos" y actúe, dado que posee competencias exclusivas en emergencias
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
El desbordamiento de ríos es otra de las consecuencias que está dejando la borrasca Kirk a su paso por Galicia.
El río Verdugo ya se ha desbordado a su paso por el ayuntamiento pontevedrés de Ponte Caldelas, anegando parques y carreteras próximas al caudal del río.
Lo mismo ocurre en la aldea de Moncelos, en el municipio lucense de Abadín. Allí, el río Anllo ya se ha desbordado a la entrada de la aldea, donde el agua afecta a las primeras casas y graneros de la zona.
El río Miño, a su paso por Cospeito, corre el riesgo también de desbordarse.
En previsión de la llegada de Kirk, la Xunta de Galicia activaba el sábado el Plan Inungal (Plan Especial de Protección Civil ante el riesgo de inundaciones en Galicia) de seguimiento sobre el nivel de los ríos debido a posibles desbordamientos puntuales en sus cursos.
En estos momentos, continúa activo.
SUBDELEGADO DE PONTEVEDRA CRITICA A LA XUNTA
El subdelegado del Gobierno en Pontevedra, Abel Losada, ha expresado su "máxima preocupación" por la "tardanza" de la Xunta en reaccionar a los efectos de la borrasca.
A este respecto, ha recordado que la Administración autonómica tiene las "competencias exclusivas" en materia de emergencias.
"La Xunta quedó de espectadora, limitándose a declarar alertas o prealertas, sin más valor que el meramente informativo, sin movilizar medios propios y dejando la gestión de las incidencias en manos de los ayuntamientos y de los equipos directivos de colegios e institutos", ha criticado.
Para Losada es incomprensible que no se haya suspendido la actividad docente en los colegios ni que hayan circulado los autobuses escolares y de transporte regular de pasajeros "en unas carreteras en condiciones extremas".
"No se puede comprender que el Plan de Emergencias Inungal esté activado en nivel de prealerta, en lugar de activar el nivel dos que implicaría la participación de los medios propios de la Xunta. La prealerta es pura retórica. Significa además dejar a los ayuntamientos a la intemperie, peleando contra inundaciones, desprendimientos y caída de todo tipo de obstáculos en los espacios públicos", ha insistido.
Confirma además que la red estatal de carreteras está "plagada" de incidencias. "No hay carreteras sin árboles, farolas o señales caídas, sin arrastres de tierra, sin tramos inundados, especialmente en los más próximos a ríos. Los servicios están desbordados y trabajando a destajo en unas condiciones extremadamente peligrosas", ha lamentado.
"Por tanto, como subdelegado del Gobierno en la provincia, apelo directamente a la Xunta para que se ponga a los mandos de sus competencias", ha instado.