SANTIAGO DE COMPOSTELA 30 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, se ha referido este martes al enésimo desencuentro con el alcalde de Vigo, Abel Caballero, en relación a los problemas de abastecimiento de agua si persiste la sequía, y ha invitado al gobierno local vigués a "hacer los deberes".
Así lo ha trasladado a preguntas de los medios durante una visita a un albergue de peregrinos en Palas de Rei (Lugo) y, tras hacer un llamamiento a todos los municipios para que revisen sus redes y arreglen posibles fugas, ha señalado que el gobierno gallego, que ya ha "ayudado" a los ayuntamientos en materia de depuración, hará ahora "especial insistencia" en el abastecimiento.
Con respecto al caso concreto de Vigo, ha apuntado que los municipios deben estar "pendientes" de que sus instalaciones puedan aprovechar un recurso "escaso" como el agua potable, y ha recordado que la ciudad olívica no puede hacer eso en el embalse de Eiras (del que se abastece) porque su potabilizadora no puede tratar el agua cuando el volumen embalsado baja del 40 %.
"Yo no lo llamaría polémica, aunque el gobierno de Vigo siempre que tiene un problema trata de convertirlo en polémica con la Xunta", ha señalado, en alusión a las críticas de Abel Caballero, y ha añadido que "hace mucho tiempo que se advirtió" de que la ETAP de Vigo, en las condiciones en las que estaba, "iba a tener muchos problemas para funcionar y garantizar el abastecimiento en momentos de sequía".
Por ello, se ha preguntado "en qué han sido empleados" los "50 millones" que los vigueses pagan al Ayuntamiento en tasas por el agua. "Desde luego, en arreglar la potabilizadora no", ha constatado, y ha lamentado que "se empezó tarde" la obra para la ampliación y modernización de esta instalación hidráulica.
Alfonso Rueda ha afirmado que "es una pena" que la ETAP no pueda garantizar el abastecimiento con un volumen de agua embalsada del 40 %, como sí pueden hacer otros municipios, y ello porque la planta de tratamiento "no puede trabajar de forma adecuada" con ese nivel de agua en Eiras (que puede alcanzarse en noviembre) y el Ayuntamiento "no lo arregló".
"Espero que esto sirva para que se pongan las pilas. Si creen que echarle la culpa a la Xunta va a solucionar el abastecimiento, les diría que no. Lo que soluciona es que hagan los deberes, y que los tuvieran hechos en tiempo y forma", ha sentenciado el presidente del gobierno gallego.