El comportamiento de otras listas ligadas a este espacio es similar, con excepciones como Sada y Vilar de Santos, cuyo alcalde cambió de siglas
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 27 May. (EUROPA PRESS) -
La división de los socios de la En Marea que se presentó a las elecciones autonómicas --actualmente rota de facto-- provocó la proliferación de candidaturas y el enfrentamiento mutuo en 15 de los 313 ayuntamientos gallegos. La lucha electoral se ha traducido en una acusada bajada o la desaparición en esa quincena de municipios, con la excepción de Cangas do Morrazo, y ha supuesto perder --solo en estas circunscripciones-- un total de 33 ediles.
Concretamente, los socios se han visto en las urnas en las siguientes localidades: Lugo y Sarria, en la provincia de Lugo; Pontevedra, Sanxenxo, Vilagarcía, Baiona, Cangas, Gondomar, Nigrán, Marín y Ponteareas, en la provincia de Pontevedra; Ferrol, Betanzos y Ames, en la provincia de A Coruña; y Ourense, en la provincia con igual nomenclatura.
Con el 99,74 por ciento de voto escrutado en toda Galicia, actualmente las candidaturas 'rupturistas' mantienen solo 17 actas de concejal en los 15 ayuntamientos donde se enfrentaron, mientras que en 2015 habían conseguido un total de 50 en estos mismos municipios, de manera que redujeron a menos de la mitad el número de representantes.
La única excepción ha tenido lugar en Cangas do Morrazo, donde las dos 'mareas' ya se habían presentado por separado en la cita anterior y donde cogobiernan en la actualidad en un tripartito. En este municipio pontevedrés Alternativa Canguesa de Esquerdas (ACE) mantuvo sus cuatro actas, mientras que Avante-Candidatura Veciñal-Mareas Locais --la que apoya la dirección de En Marea dirigida por Luís Villares-- conservó los tres ediles que tenía.
Con todo, Alternativa Canguesa y el PSOE empataron a cuatro ediles en esta ocasión --frente a los 7 de la candidatura más votada, la del PP--, por lo que para revalidar un gobierno de coalición ahora entra en juego también los socialistas.
DESAPARECEN EN NUEVE Y BAJAN EN CUATRO
En el lado opuesto se sitúan las confluencias y candidatos del espacio 'rupturista' que, teniendo representación en 2015, han acabado desapareciendo tras los comicios de este domingo 26 de mayo en nueve municipios. En detalle, se trata de Betanzos (A Coruña); Pontevedra, Sanxenxo, Baiona, Nigrán, Marín y Ponteareas --en la provincia de Pontevedra--; y en los ayuntamientos de Lugo y Ourense.
Mientras, en cuatro municipios, las candidaturas de este espacio redujeron su representación, pero conservan concejales: Ferrol, Ames, Vilagarcía y Gondomar.
PROVINCIA DE PONTEVEDRA
Así, en la ciudad de Pontevedra, Marea de Pontevedra perdió los dos representantes que tenía en la corporación, mientras Unidas Podemos no consiguió representación y quedó incluso más de 200 votos por debajo de sus socios.
En Vilagarcía de Arousa, en que los socios 'tradicionales' de Unidas Podemos concurrieron por separado, el espacio se dejó un representante. Así, Vilagarcía en Común --apoyada por En Marea e Izquierda Unida-- pasó de tres representantes a uno solo; mientras que Marea da Vila (Podemos y Anova), que no tenía concejales, consiguió uno.
En Sanxenxo, por su parte, la coalición Podemos-Anova Son en Común se dejó el representante que tenía, mientras que la marea de Luís Villares no logró irrumpir en el municipio. Situación similar es que la se dio en Marín, en que la Marea Veciñal-Marea de Marín (que apoyaba Anova) perdió los tres representantes que tenía, mientras que Ser de Marín (apoyada por En Marea) y Podemos tampoco accedieron al Consistorio.
En el sur de la provincia pontevedresa, solo se mantienen en Gondomar, con dos ediles para Manifesto Miñor; mientras que en Baiona y en Nigrán se pierden dos, respectivamente, en las candidaturas de Son en Común. En Ponteareas, por su parte, las candidaturas de confluencias se dejaron los dos concejales que tenían (Riada Cidadá) y EU-Son en Común.
PROVINCIA DE A CORUÑA
En la provincia de A Coruña, la pérdida más sonora es la de Ferrol en Común, una bajada que también le supondrá a la formación liderada por Jorge Suárez dejar de gobernar en la ciudad departamental. Así, de seis ediles obtenidos en las urnas en mayo de 2015, esta candidatura se quedó con tres representantes, mientras que Marea de Ferrol (la apoyada por En Marea) y Xuntos Actúa (una escisión de Podemos que en su día también estuvo en Ferrol en Común) se quedaron en cero representantes.
En Betanzos también se enfrentaron los socios de En Marea con Betanzos Novo y Unidas Podemos --que está básicamente ligada a la formación morada--, pero ninguna de estas candidaturas logró representación. Por lo tanto, desaparecieron también los dos ediles que antes tenía Betanzos Novo.
En Ames las dos formaciones de este espacio político consiguieron representación en la corporación, pero la reducción también es significativa. Por un lado, Contigo Podemos pasa de tres ediles a dos y Ames Novo --apoyada por En Marea--, de cuatro concejales a uno.
PROVINCIA DE LUGO
En Lugo desaparecen los tres ediles de la candidatura Lugo Novo y el representante de Alternativa Cidadá de Esquerdas-Esquerda Unida, tres concejales que sumó a su grupo el BNG. Además, Podemos, que también se presentó por separado originando tres candidaturas en el mismo espacio, tampoco consiguió representación. En la misma provincia, ninguna de las candidaturas --Podemos Son en Común y En Marea Sarria-- obtuvieron acta de concejal.
Finalmente, en la ciudad de As Burgas, Ourense en Común --que en estas elecciones solo apoyó Anova-- se dejó los tres ediles que tenía hasta ahora en la corporación; mientras que la lista de Podemos-Esquerda Unida y Ourense Mellor (la que apoyaba En Marea) tampoco lograron entrar en el Consistorio.
GOBIERNOS SIMBÓLICOS DEL ESPACIO
Por otro lado, el comportamiento en los ayuntamientos en los que ostentaban la Alcaldía alguna de las candidaturas ligadas a este espacio de confluencia --al margen de Santiago, A Coruña y Ferrol-- ha sido desigual.
Por un lado, se ha reforzado el gobierno de Sada, cuyo regidor, Benito Portela (de Anova), ha sido la fuerza más votada y ha ganado dos ediles frente a 2015; mientras que en Vilar de Santos, Xan Jardón ha vuelto a lograr la mayoría absoluta sin oposición, esta vez con una lista asociada a En Marea tras su paso por Compromiso por Galicia.
En esta misma órbita --aunque como candidatura propia--, se vio reforzada la candidatura Nós Pobra, que ya gobernaba con Xosé Lois Piñeiro a la cabeza. Así, ahora se sitúa como fuerza más votada con cinco ediles, frente a los cuatro de 2015, y empatado con el PP, aunque con la posibilidad de revalidar con el apoyo de PSOE y/o del BNG.
Sin embargo, una de las alcaldías simbólicas de este espacio de confluencia, es la de Manzaneda en la que era regidor Davide Rodríguez (actual diputado de En Marea), el partido de Luís Villares ha cedido al PSOE la posición que tenía hasta ahora el exregidor --que dejó de serlo esta legislatura para ser diputado autonómico--.
En Teo, la candidatura de confluencia de Rafa Sisto (que pertenece a Anova) pasa a segunda fuerza y se deja tres ediles; mientras que en Val do Dubra (otra de las alcaldías de confluencia ligadas a Anova con Antonio Negreira), Son do Val do Dubra también pierde dos ediles y se queda como fuerza más votada con tres, pero dificultades para hacer pactos de gobierno.
Otra de las alcaldías simbólicas de este espacio es el de Salceda de Caselas con Marcos Besada. Podrá gobernar con los tres ediles del PSOE, pero de los seis con los que contaba, ahora ha pasado a cuatro representantes.
En esta misma órbita se sitúa Vimianzo con uno de los alcaldes que eran significativos en el BNG, Manuel Antelo. En 2015 se presentó con las siglas del BNG y, con la candidatura Adiante Vimianzo, pasa a segunda fuerza política detrás del PSOE al dejarse tres representantes.