El detenido estuvo en A Pobra do Caramiñal el día que desapareció la joven
RIANXO (A CORUÑA), 29 (A CORUÑA)
Los vecinos de la parroquia de Taragoña, en Rianxo (A Coruña), se han mostrado "impactados" por la detención a primera hora de la mañana de un vecino por un intento de secuestro en Boiro, que se investiga si está relacionado con la desaparición de la joven Diana Quer.
En concreto, los agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) tratan de recabar pruebas que lo vinculen con la desaparición de La joven madrileña en A Pobra. Para ello, los agentes han inspeccionado el domicilio familiar.
El hombre, José Enrique A. G., conocido como 'El chicle', vive desde hace unos diez años junto a su mujer, que también ha sido arrestada, en el lugar de Outeiro, en una casa que hoy ha estado custodiada durante toda la jornada por agentes de la Guardia Civil para evitar que alguien pudiese entrar en su interior.
Está previsto que efectivos del puesto de Rianxo permanezcan aquí durante toda la noche hasta que las autoridades correspondientes ordenen su retirada o un nuevo registro de las dependencias.
Y es que al detenido ya se le tomó declaración con anterioridad en el marco de las diligencias por la desaparición de Diana Quer, aunque sin avances en la investigación que llevó el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Ribeira, que hace seis meses archivó el caso por falta de indicios sobre sospechosos.
HIJA EN COMÚN
Frente a la vivienda en la que residía el matrimonio, que tiene una hija adolescente en común, se han congregado numerosos vecinos durante toda la jornada, que se han mostrado "impactados" por la detención del matrimonio.
"La parroquia de Taragoña, por no decir todo Rianxo, es muy pequeña y nos conocemos todos y una noticia así te sorprende siempre aunque ya se hablase de la familia por otros asuntos", explicaban los vecinos que señalan que eran conocedores de que el hombre cuenta con antecedentes.
Así, tiene antecedentes por tráfico de drogas y también por algún episodio violento.
Las alertas saltaron cuando se tramitó el 26 de diciembre una denuncia de una joven que decía que este hombre le había intentado robar el móvil intimidándole con un cuchillo. El arresto de este viernes por la mañana se ha realizado exclusivamente por tentativa de secuestro en Boiro, ya que quiso introducirla en el maletero de un vehículo.
EL TELÉFONO DE DIANA QUER
Los agentes centraron la investigación por la desaparición uniendo el trayecto entre A Pobra do Caramiñal, el pueblo donde veranea la familia de Diana Quer y donde desapareció el 22 de agosto de 2016, y la ría de Taragoña donde un mariscador encontró el iPhone 6 de color blanco de la joven de 18 años. Hace seis meses el juez archivó el caso sin encontrar un sospechoso.
Entre A Pobra do Caramiñal y la ría en Taragoña distan otros 15 kilómetros. Fuentes de la investigación insisten en que la conexión entre la detención del varón vecino de Rianxo, que no es feriante, por el intento de secuestro de una joven y la desaparición de Diana Quer se encuentra en una fase prematura en la que se trata de recabar nuevas pruebas y revisar las ya obtenidas con anterioridad.
Los agentes de la UCO limpiaron el teléfono de Diana Quer y utilizaron la tecnología de la empresa israelí Cellebrite con sede en Múnich (Alemania) para desbloquear el terminal. "Estoy en condiciones de confirmar que han desbloqueado el móvil y han podido acceder a la información a la que hasta ahora no habían podido tener acceso", comentó el pasado julio Diana López Pinel, madre de la madre de la joven desaparecida.
López Pinel aseguró que los agentes de la UCO le habían confirmado que el teléfono registró siete intentos fallidos de desbloqueo antes de ser arrojado a la ría, según se desprendió del análisis que realizó el Servicio de Criminalística de la Guardia Civil (SECRIM).
La aparición del móvil de Diana Quer reforzó la tesis de que la joven pudo montarse en un coche que se desplazó hasta la zona de Taragoña-Rianxo. La UCO tomó decenas de testimonios y revisó cámaras de tráfico, además de rastrear la señal emitida por los teléfonos móviles en las horas posteriores a la desaparición de la joven madrileña.
Diana Quer, de 18 años, fue vista por última vez en torno a las 2,40 horas en el Paseo de O Areal de A Pobra do Caramiñal, cuando supuestamente volvía a pie de la verbena en dirección a la casa donde dormían su madre y su hermana menor. Su teléfono continuó dando señales de vida hasta las cinco de la madrugada, según la investigación policial.