Los grupos respaldan compensaciones para los pequeños accionistas y solicitan la continuidad de la Fundación Barrié
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 7 Jul. (EUROPA PRESS) -
Los cuatro grupos políticos con representación parlamentaria han respaldado una proposición no de ley para reclamar que el Banco Santander, nuevo propietario del Banco Popular, mantenga la "condición jurídica de filial integrada dentro del grupo bancario" del Pastor y solicitar a los órganos de supervisión una investigación de las últimas ampliaciones de capital y emisiones de acciones.
La proposición no de ley impulsada por En Marea fue negociada sobre una enmienda del PP y recibió el respaldo unánime también del PSdeG y del BNG. El texto final, además de instar a la Xunta a defender la supervivencia de la marca Pastor, también apuesta por manifestar la solidaridad con los trabajadores de ese banco, su fundación y las numerosas empresas auxiliares, así como con los afectados por la extinción del Popular, con la clientela y con el accionariado.
Las cuatro fuerzas políticas también apuestan por la investigación de las últimas ampliaciones de capital y emisiones de acciones para determinar si los suscriptores contaron con información "clara, nítida y precisa" para sus inversiones.
Asimismo, pretenden que se solicite a la dirección del Banco Santander la compensación de las pérdidas sufridas por los pequeños accionistas del Pastor, con una "especial consideración" con quienes accedieron a la última ampliación de capital, de manera que "puedan recuperar su inversión".
La Cámara gallega quiere buscar "el menor impacto posible" tanto sobre el empleo como sobre la concesión de crédito e invita a que los "ajustes" que haya que hacer sean "con el mayor acuerdo posible y defendiendo los intereses de los trabajadores en el campo de las competencias que tiene la Xunta".
Otro de los puntos del acuerdo parlamentario reclama que el nuevo propietario del Pastor mantenga los compromisos que en su momento adquirió el Popular con la Fundación Barrié para que pueda seguir con su labor social y cultural "con recursos suficientes".
DETERMINAR SI HUBO ESTAFA
El diputado de En Marea, Antón Sánchez, que fue el encargado de defender la proposición no de ley impulsada por su grupo parlamentario, invitó a reflexionar acerca de "qué está fallando en los mecanismos de supervisión y en la protección" de los pequeños inversores, que "fallan una y otra vez".
A juicio de En Marea, de la compra del Banco Popular por el Santander por un solo euro se derivan "tres urgencias": proteger el empleo después del "ajuste de personal muy grande" que ya se había practicado, preservar la actividad de la obra social de la Fundación Barrié y aclarar si hubo "engaños" a los pequeños accionistas. Antón Sánchez se refirió a ellos como "hipotéticos estafados" y apuntó que cree que "hay indicios" de que sí lo fueron.
Por su parte, el portavoz parlamentario del PP, Pedro Puy, explicó la enmienda promovida por su partido y se refirió a un acuerdo aprobado en el Ayuntamiento de A Coruña. Además, apeló a llegar a un acuerdo también en el Parlamento autonómico entre las diversas fuerzas, dado que comparten "una serie de preocupaciones" y de esta forma se da "una buena señal" a todos los afectados.
Por el PSdeG, Abel Losada dejó constancia de su "perplejidad constante" ante "la ficción de la regulación y la supervisión bancaria", dada su "falta de aproximación a la realidad". Asimismo, aludió a la "coacción" sobre trabajadores del Popular para comprar acciones del banco y rechazó que la iniciativa parlamentaria aprobada conlleve también una defensa de los grandes inversores.
Finalmente, la diputada del BNG Noa Presas ironizó con que "está bien" que el PP apoye esta iniciativa y no se ampare en que Galicia no tiene competencias. También advirtió que ésta puede ser "una nueva estafa para muchas personas" y alertó contra los riesgos que conlleva la exclusión financiera.