SANTIAGO DE COMPOSTELA 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
Expertos procedentes de más de veinticinco países de diferentes partes del mundo se dan cita desde este miércoles y hasta el próximo día 8 en Compostela, convertida en eje de los tres grandes centros de cristiandad: Santiago, Roma y Jerusalén, gracias a la celebración del VIII Congreso Mundial de Pastoral de Turismo, que organizan conjuntamente el Arzobispado de Santiago de Compostela, el Dicasterio para el Servicio de Desarrollo Humano Integral y la Conferencia Episcopal Española, y que fue inaugurado en la Hospedería de San Martiño Pinario con la presencia de más de 200 personas.
El arzobispo de Santiago, Monseñor Julián Barrio, en su papel de anfitrión, fue el encargado de dar la bienvenida a los participantes en el acto inaugural, que contó con la presencia de monseñor Dariusz Giers, miembro del Dicasterio para el Servicio al Desarrollo Humano Integral de la Santa Sede; monseñor Ciríaco Benavente, responsable de la Pastoral de Turismo de la Conferencia Episcopal Española; Jacobo Bordignon, representante de la Organización Mundial de Turismo; Blanca García-Señoráns, directora xeral de Relaciones Institucionales de la Xunta de Galicia; y Gumersindo Guinarte, concejal responsable de Presidencia, Relaciones Institucionales y Turismo del Concello de Santiago de Compostela.
El Congreso Mundial de Pastoral de Turismo, planteado como un "lugar de encuentro, de acogida y de reflexión", se celebra en Compostela, "un hogar espacioso y de puertas abiertas, donde se ha venido dispensando por los siglos y siglos, sin discriminación alguna, el pan de la perdonanza y de la gracia, y que quiere "seguir siendo foco luminoso de vida cristiana, y reserva de energía apostólica para nuestras vías de evangelización", ha señalado el arzobispo de Santiago.
Para monseñor Barrio, el VIII Congreso Internacional de Turismo que se desarrolla esta semana con el lema 'Turismo y Peregrinación. Caminos de Esperanza', es "un evento muy importante" por dos motivos fundamentales.
En primer lugar, porque el fenómeno del turismo "puede ayudarnos a comprender al que viene de lejos, porque ofrece la oportunidad de acoger, escuchar, dialogar y comprender" y, por otra parte, "la realidad de las peregrinaciones que vive esta Archidiócesis tiene vocación de escuela eficaz para ofrecer al turismo los valores de humanidad, encuentro saludable y también espiritualidad".
El arzobispo habló también en su intervención del deseo de viajar y conocer otras realidades diferentes de aquellas en la que uno desarrolla su vida como un "deseo inherente a la condición humana", explicando que "el peregrino es un viajero de lo sagrado y un transmisor de saberes" y que el turismo es "un hecho social, cultural y económico con diferentes facetas" .
"La Iglesia, sabiendo que el hombre es el camino que tiene que recorrer, ha seguido pastoralmente este fenómeno que tiene sus luces y sus sombras" con el objetivo de "impregnar de sentido cristiano esta dimensión humana", ha apuntalado
CONSECUENCIAS POSITIVAS
Recordando las palabras de San Juan Pablo II, Monseñor Barrio explicó que el turismo es el modo de emplear el tiempo libre y que debe contribuir a recuperar el déficit de humanidad. Una reflexión que le llevó a solicitar al Dicasterio romano conjuntamente con el Departamento de Turismo de la Conferencia Episcopal Española que este VIII Congreso de Turismo se realizara en Compostela, "consciente de las consecuencias positivas que podría tener religiosa, cultural, social y económicamente y en el contexto de la celebración del Año Santo Compostelano".
Monseñor Barrio finalizó su intervención deseando que "el Apóstol Santiago haga resonar desde aquí la esperanza para que nuestro mundo sea cada vez más transparente al Evangelio y sea lugar donde crezcan la comunión y la unidad, de forma que el rostro de Cristo resplandezca con todo su fulgor para la paz y el gozo de todos los habitantes de los distintos Continentes".
Por su parte, los representantes de los organismos eclesiásticos organizadores destacaron la importancia del congreso que se celebra en la capital gallega diez años después del último, que tuvo lugar en Cancún en 2012, y en el que se pondrán en común pensamientos y reflexiones sobre distintos aspectos del turismo.
Entre las reflexiones, estará la de "aprender a utilizar bien el tiempo libre, la necesidad de repensar el turismo tras el covid y la guerra de Ucrania", así como "hacer que sea más sostenible y respetuoso con la comunidad local, el patrimonio y la cultura, la elaboración de la teología del descanso, o el anti turismo a través de la trata de personas, la prostitución y las nuevas formas de esclavitud ligadas a esta situación, tal y como adelantaron en su presentación".