IBIZA, 8 Mar. (EUROPA PRESS) -
Unas 3.000 personas han participado en Ibiza en la manifestación convocada por la Comisión Feminista 8 de Marzo, recorriendo las principales calles de la ciudad con lemas como 'No nos mires, únete' o 'Si nosotras paramos, se para el mundo'.
En su manifiesto, las participantes en la protesta han denunciado que Baleares es una de las comunidades con la tasa más alta en cuanto a víctimas de violencia machista y hay escasos recursos para su atención.
Así, han criticado que en Ibiza existe una "situación sin precedentes" por la falta de efectivos para la protección y seguimiento de los casos de violencia de género y han lamentado la falta de instalaciones adecuadas a causa del incendio que arrasó el edificio de Juzgados.
También han criticado que la Oficina de la Mujer en Ibiza tenía a finales de 2018, y por primera vez en su historia, una lista de espera de 44 mujeres víctimas de malos tratos a la espera de una cita con el área de psicología por falta de personal.
Por ello, han demandado que la atención a mujeres víctimas de violencia cuente con todos los recursos necesarios y de calidad.
En el manifiesto de la Comisión Feminista 8 de Marzo en Ibiza, las portavoces han defendido la huelga de este viernes para demostrar que si la mujer para, "se para el mundo", destacando además la convocatoria "para hacer visibles trabajos, demandas y cuerpos".
Con la fuerza colectiva, han clamado, se han ido abriendo espacios y consiguiendo algunos cambios, pero "no todos ni para todas" ya que las vidas de las mujeres "siguen marcadas por las desigualdades, por las violencias machistas, por la precariedad, por procesos de exclusión derivados de empleos", entre otras cosas.
"Esto ni empieza ni acaba el 8 de marzo", han destacado durante la lectura del manifiesto, remarcando también que este año el colectivo se une al "grito global lanzado por las mujeres en Brasil, en EEUU, en Italia, en India y en otras partes del mundo frente a las reacciones patriarcales por el avance de las mujeres en el logro de sus derechos y frente a una derecha y extrema derecha que ha situado a mujeres y migrantes como objetivo prioritario de su ofensiva ultraliberal, racista y patriarcal".
Asimismo, han pedido que se consideren las violencias machistas como una "cuestión que atañe a toda la sociedad y se tengan en cuenta sus distintas causas y dimensiones".
Las manifestantes también han reclamado que las personas disidentes sexuales, con especial atención a las mujeres trans, dejen de sufrir agresiones y múltiples violencias y han exigido que la educación afectivo-sexual esté contemplada en el currículo escolar y sea "integral, libre de estereotipos sexistas, racistas y LGTBIfóbicos".
También han pedido que el aborto esté fuera del Código Penal y se reconozca como un derecho de las mujeres y personas con capacidad de gestar, a decidir sobre su cuerpo y su maternidad.
EN BALEARES LAS MUJERES COBRAN UN 21% MENOS
Durante la lectura del manifiesto, se ha exigido además que se rompa la división sexual del trabajo que condena a la mujer a la precariedad, la discriminación laboral y los trabajos "peor pagados, no remunerados, invisibles e ilegales".
También han lamentado que el salario medio de las mujeres en Baleares es de 16.490 euros anuales, un 20,9 por ciento menos que los hombres, según un estudio sobre la brecha salarial realizado por Hacienda.
En la protesta se ha denunciado la "preocupante" situación de las trabajadoras de la limpieza, las empleadas domésticas y las camareras de pisos, destacando que el colectivo de las Kellys de Ibiza lleva una "larga" lucha para reivindicar una jubilación a los 60, el reconocimiento de sus enfermedades como enfermedades laborales y la sobremedicación a causa de la carga de trabajo.
Además, en Ibiza la temporalidad del mercado laboral, que obliga a trabajar muchas horas en pocos meses, hace "prácticamente imposible" la conciliación laboral, familiar y personal, han concluido.