IBIZA, (EUROPA PRESS)
La delegada de Educación en Ibiza y Formentera, Margalida Ferrer, ha destacado que desde que terminó el proceso de admisión de alumnos para el curso 2016-2017 se han incorporado a las aulas pitiusas 646 estudiantes, según datos recopilados hasta el pasado mes de febrero.
Según ha detallado en declaraciones a Europa Press, hasta el 14 de septiembre se habían incorporado al nuevo curso 311 estudiantes. "Suerte que también ha habido algunas bajas", ha dicho Ferrer.
Por municipios, en Ibiza se han registrado 232 incorporaciones; en Sant Antoni, un total de 126; en Santa Eulària hay 149 nuevas matriculaciones; en Sant Josep, 93; 16 en Sant Joan y 30 en Formentera.
"El pasado enero se produjo un pico de incorporaciones porque algunas familias sudamericanas acaban allí el curso y después vienen aquí a trabajar", ha dicho la delegada.
Ferrer ha reconocido que "el año pasado también hubo mucha demanda, pero en menor medida, y el motivo son las buenas perspectivas turísticas y laborales existentes en Ibiza y Formentera".
La responsable de Educación ha destacado además las "complicaciones" que provoca recolocar a todos estos estudiantes y ha recordado que a comienzos de septiembre "ya hubo bastante demanda de una serie de centros donde nos habíamos quedado cortos en recursos de atención a la diversidad, pero lo hemos ido solventando".
"El curso está en marcha, aunque hay un goteo continuo de gente que llega y, por ello, los centros deben irse adaptando y es un gran trabajo", ha afirmado Ferrer.
A comienzos de mayo se abrirá el proceso ordinario de matriculación de los niños para el curso 2017-2018.
La delegada ha valorado además el trabajo de los docentes de atención a la diversidad para los alumnos con dificultades de integración principalmente debido al idioma. Hasta febrero, 337 de esos alumnos recién llegados eran españoles. Del resto, 38 eran italianos, otros 38 marroquíes, 24 británicos y 23 argentinos, entre otras nacionalidades.