PALMA, 25 Jun. (EUROPA PRESS) -
Los acompañantes del acusado por el accidente del 'Cucurutxo' de Portocolom han declarado este martes, como testigos, que el conductor sufrió un desmayo y que el siniestro fue fortuito, corroborando la versión del procesado.
La Fiscalía vincula el suceso al presunto amaño del concurso de playas de Felanitx de 2014 que juzga este mes la Audiencia Provincial. El conductor es el exencargado del chiringuito de Cala Marçal, en aquel momento empleado del empresario ganador, y el establecimiento afectado era el de un competidor que había impugnado las adjudicaciones.
Las acusaciones sostienen que fue un choque deliberado. El fiscal pide para el hombre dos años de cárcel por coacciones, mientras que la defensa mantiene que fue un accidente sin intencionalidad.
Este martes han comparecido el hijo del acusado, que iba de copiloto en el todoterreno siniestrado, y un trabajador del chiringuito, que iba en la parte de atrás. Ambos han ofrecido la misma versión que el conductor: que venían de reponer un congelador averiado en el chiringuito cuando, al tomar una curva, el piloto se desvaneció y se estrellaron.
"Lo que recuerdo es que después de la curva, íbamos hablando y mi padre se empezó a encontrar mal y a cabecear", ha apuntado su hijo, que ha negado que nadie del vehículo instara a acelerar --como sostiene haber escuchado un vecino que paseaba por el lugar-- o que después del choque intentaran abandonar el lugar.
El hijo del conductor ha continuado explicando que tras el choque estaba intentando reanimar a su padre echándole agua sobre la cabeza mientras el responsable del chiringuito les increpaba y amenazaba: "Hijos de puta es la expresión que más recuerdo".
En este sentido ha desmentido que ellos tuvieran una actitud desafiante y de mofa hacia el responsable del local destrozado; respecto a la fotografía que le hizo el perjudicado, donde se le ve a él haciendo un gesto de 'ok' con el pulgar, el testigo ha apuntado que fue "mucho después" del choque y cuando el joven seguía increpándoles. "Ni lo recordaba", ha comentado.
El testigo también ha afirmado que su padre permaneció "dentro del vehículo, sentado y con la cabeza encima del volante" y que "no interactuó" con el responsable del local: "No hubiera podido aunque hubiera querido". Un viandante que se acercó tras el choque ha confirmado que que el conductor estaba "semiinconsciente, dormido" y que así lo transmitió a la Policía Local.
Por otro lado, también ha comparecido este martes un vigilante de Demarcación de Costas que ha destacado que en aquella época había "tensión" en las playas, "un malestar que no era habitual", y que le ponían "mala cara" cuando hacia sus vigilancias.
Este trabajador --que avisó al dueño del 'Cucurutxo' de que tuviera cuidado, poco antes del incidente--, constató una serie de incumplimientos en la concesión del empresario ganador, a raíz de una denuncia del competidor por exceso de instalaciones --hamacas, sombrillas, etc--. Con todo, desconocía si los expedientes terminaron en sanción.
Paralelamente, un trabajador encargado de las finanzas de la empresa ganadora ha explicado que mantuvieron durante cinco años la concesión de 2014 y que los resultados fueron positivos, de una media de 75.000 euros por año.
PRESUNTO AMAÑO DE UN CONCURSO DE PLAYAS
La Audiencia juzga este incidente dentro de la pieza por el presunto amaño del concurso de playas de Felanitx de 2014. La Fiscalía Anticorrupción pide para el exalcalde del PP Biel Tauler una pena de dos años de cárcel y 20 años de inhabilitación para ejercer cargo público, por presuntos delitos de prevaricación continuada y fraude.
El fiscal acusa al exalcalde y el exconcejal de Playas, Juan Ramón Vidal, de haberse concertado para asegurar que la concesión fuera a parar a Marportsunbeach, cuyo dueño era amigo del regidor. Junto a ellos hay otros cuatro acusados.
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