PALMA 18 Oct. (EUROPA PRESS) -
El acusado de disparar contra un vehículo en un supermercado de Ibiza en diciembre de 2022 tras una discusión ha negado ser el autor de las detonaciones y ha atribuido los tiros a un compañero de trabajo que iba con él en aquel momento y que tenía la intención de "dar un susto" a una persona que les había acusado de violar a su pareja.
"Ni tengo ni he tenido nunca armas. Nunca he disparado a nadie", ha señalado a preguntas de su abogado y de la fiscal durante el juicio en la Sección Segunda de la Audiencia Provincial.
El procesado ha declarado en último lugar y, aunque ha reconocido su presencia en el lugar de los hechos y su participación en una discusión, ha negado en varias ocasiones haber sido el autor de los disparos que impactaron en el vehículo del denunciante.
El hombre ha admitido que no declaró este extremo en instrucción por consejo de su anterior abogado y "porque nadie quiere tener problemas con una persona que tiene un arma".
Respecto a la tardanza en ser localizado --fue detenido en Madrid tres meses después de los hechos-- ha explicado que el mismo día de los hechos comenzó a trabajar en un barco con el que se dirigió a Alicante y que más tarde, de nuevo siguiendo la recomendación de su anterior letrado, se trasladó a Madrid, donde finalmente fue arrestado en marzo de 2023.
Según ha declarado, la víctima de los disparos le identificó a él como el autor de los tiros porque fue la persona con la que había mantenido un encontronazo anterior.
En la sesión de este viernes también ha declarado una amiga del procesado con la que aquel día había quedado en el supermercado. La mujer ha asegurado que sólo presenció unos "chispazos" que, en ningún caso, le parecieron disparos.
CONFUNDIDO CON EL SUPUESTO AUTOR DE UNA VIOLACIÓN
El juicio arrancó el pasado lunes con la declaración del denunciante, que aseguró que el acusado "enfureció" cuando, por una confusión, le había acusado de violar a su pareja.
El hombre aseguró que se acercó al procesado "de buenas maneras" al confundirle con el supuesto autor de los abusos. "En vez de decirme que me estaba confundiendo, me amenazó y me retó a salir fuera a pelar", ha continuado.
El padre de este hombre, que también ocupaba el vehículo que recibió los disparos, explicó que presenció la discusión y que tras subirse a su coche y salir del aparcamiento, a los pocos metros el procesado les estaba esperando a bordo de otro coche en una boca calle y apuntándoles con una pistola, momento en que efectuó dos disparos.
Durante la vista, declaró como testigo un amigo común de las partes, que ese día había acudido con la víctima al establecimiento, y afirmó que trató de mediar en la discusión y que más tarde, el procesado le aseguró que "no tenía nada que ver".
Un agente de la Guardia Civil añadió que en los vídeos de las cámaras de seguridad que se revisaron se ve "claramente" que la persona que primero discutió con la víctima, la que primero abandonó en coche el establecimiento y la que espera al otro coche antes de los disparos son la misma.
DISCUSIÓN EN UN SUPERMERCADO
Los hechos, según sostiene el Ministerio Fiscal en su escrito de acusación, ocurrieron en diciembre de 2022 en la isla de Ibiza cuando el procesado se encontraba en el interior de un local y comenzó una discusión con otra persona, hasta que abandonó el lugar con su vehículo.
Posteriormente, el acusado esperó con su coche aparcado a que pasara la víctima, que iba en un coche con su padre. En este momento, siguiendo el relato de la Fiscalía, el varón realizó dos disparos con arma de fuego que impactaron en el vehículo, sin alcanzar a los ocupantes.
El Ministerio Público considera los hechos constitutivos de dos delitos de asesinato en grado de tentativa y de un delito de tenencia ilícita de armas y pide para el acusado 21 años y seis meses de cárcel, así como la prohibición de acercarse a las víctimas durante ocho años.