PALMA DE MALLORCA, 15 Dic. (EUROPA PRESS) -
El conseller de Territorio, Energía y Movilidad del Govern balear, Marc Pons, ha pedido este jueves al Ministerio de Fomento que parte del parque de vivienda vacía que tiene en stock la Sareb y que lleve más de dos años cerrada sea utilizada como vivienda social, mediante una cesión a los institutos públicos de vivienda de las CCAA.
Según ha explicado la Conselleria en un comunicado, a raíz de la asistencia de Pons a la Conferencia Sectorial de Vivienda, Urbanismo y Suelo que ha convocado el Ministerio esta mañana, el conseller balear ha exigido medidas para descongestionar el mercado de vivienda de las Islas en general y, en concreto en Ibiza, así como más margen para modificar el límite de 600 euros de alquiler para acceder a las ayudas.
El conseller ha defendido que Baleares necesita "medidas urgentes" para descongestionar el mercado de la vivienda, el cual, en la comunidad autónoma en general y en la isla de Ibiza en particular, "está sufriendo fuertes alteraciones y el empeoramiento, cada vez más, de las condiciones de acceso a una vivienda".
Pons ha destacado que el objetivo es "poner al alcance de la ciudadanía balear un mayor número de pisos en régimen de alquiler a precios sociales".
En este sentido, el conseller ha afirmado que "no podemos permitir que existan bolsas de vivienda cerrada al mismo tiempo que hay dificultades para acceder a ésta" y que "entidades semipúblicas como la Sareb tienen que contribuir a regular el mercado de la vivienda" ya que "no podemos permitir que sean uno de los causantes de esta situación".
Además de la cesión de pisos, el conseller ha propuesto que la Sareb destine un porcentaje de su suelo residencial para la construcción de nuevas promociones de VPO con el fin de ampliar el parque actualmente existente de vivienda social y garantizar una bolsa constante para atender los casos que requieren más atención.
ADAPTACIÓN DEL PLAN DE AYUDAS AL ALQUILER
La Conferencia Sectorial ha servido para informar a autonomías de que se producirá una prórroga del Plan estatal para el fomento del alquiler de viviendas, la rehabilitación edificatoria, la regeneración y la renovación urbanas 2013-2016.
En este sentido, Pons ha lamentado que con esta prórroga no se hayan incluido algunas de las demandas de Baleares, donde "se está produciendo una situación de bloqueo para acceder a una vivienda y, por lo tanto, se requieren actuaciones inmediatas".
Aunque no se hayan podido formular propuestas para el año que viene, Marc Pons ha presentado propuestas al programa de ayudas de alquiler para el nuevo Plan estatal de vivienda, que se pondrá en marcha a partir de 2018.
El Plan actual fija en 600 euros el precio máximo de alquiler para poder acceder a una ayuda, lo cual Baleares considera un "agravio comparativo" respecto de la mayoría de comunidades autónomas en las que la media de precio es sensiblemente inferior que en las Islas.
Según la Conselleria, muchos ciudadanos de Baleares "se quedan sin poder acceder a las ayudas". En este sentido, el conseller ha reclamado "más margen" para que sean las comunidades autónomas las que fijen el límite del alquiler.
Ha recordado que en determinados municipios, como en Ibiza, "es prácticamente imposible encontrar un alquiler inferior a 600 euros".
Por otra parte, propone también que los menores de 35 años tengan mayor puntuación para acceder a estas ayudas, con la finalidad de facilitar el proceso de emancipación de los jóvenes y darles apoyo en uno de los puntos más complicados para iniciar su proyecto de vida.
AMPLIACIÓN DEL PARQUE DE VIVIENDA
También se han presentado propuestas directamente encaminadas a incrementar el parque de vivienda a precio social con medidas que incentivan a los propietarios privados que puedan tener vivienda vacía y cerrada.
Así, se propone que el nuevo Plan estatal de vivienda incluya una línea de ayudas a propietarios de pisos desocupados para incentivar la apertura de estas viviendas en régimen de arrendamiento y ampliar el parque existente.
Como condición para acceder a dicho incentivo, los precios de alquiler tendrían que respetar unos máximos, con lo cual, además de incrementar el stock existente, éste tendría "unos precios asequibles".
En esta misma dirección, existe una propuesta de crear una línea de ayudas a la rehabilitación para fomentar el arrendamiento de los pisos, una vez renovados, siempre que los precios se mantengan dentro de lo que se puede considerar precio social.
Por otra parte, el conseller ha pedido que se abra una línea de financiación para promotores, tal como existía en planes estatales anteriores, para incentivar la construcción de vivienda social privada.
INCENTIVACIÓN DE LA REHABILITACIÓN
El Govern ha presentado también una batería de medidas para fomentar la rehabilitación y contribuir a mejorar las condiciones y calidad de las viviendas.
En este sentido, la propuesta se centra en tres ejes de trabajo diferentes: abrir las líneas de rehabilitación existentes en el plan actual en las viviendas unifamiliares; eliminar el mínimo de ocho viviendas para abordar obras de rehabilitación con ayudas; y crear una línea de ayudas a la rehabilitación interior de viviendas en general y favorecer "de forma muy concreta" las obras para eliminar barreras arquitectónicas.
ADQUISICIÓN DE VIVIENDA
El conseller ha insistido en el hecho de que el plan de vivienda del Ministerio debe incluir medidas para ayudar a adquirir una vivienda, especialmente a los jóvenes de hasta 35 años.
Como medida concreta, ha propuesto implantar una ayuda para constituir el préstamo hipotecario y contribuir al pago de los gastos derivados de la constitución del préstamo.
Asimismo, se propone otra línea para financiar un porcentaje del precio de adquisición de la vivienda.