En verano, se llegan a recoger del suelo 500 kilogramos de residuos todos los días
PALMA DE MALLORCA, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -
Calvi 2000 y la Policía Local han lanzado una campaña para evitar la suciedad producida por los clientes de los 'takeaway' --comida rápida-- en Magaluf, ya que estos establecimientos son "los responsables de las tareas de limpieza del área de influencia próxima de su actividad".
Según han explicado desde el Ayuntamiento del municipio, dichos locales abundan especialmente en Punta Ballena y trabajan prácticamente las 24 horas del día, por lo que cada día se produce "una gran acumulación de residuos plásticos --vasos, pajitas, platos, envoltorios-- y orgánicos --restos de comida, vómitos y líquidos de las bolsas de basura-- a primera hora de la mañana.
Ante esta situación, la empresa pública de limpieza se ve obligada destinar diariamente un equipo de más de 20 operarios en las calles Punta Ballena, Martí Ros y alguna adyacente. En verano, se llegan a recoger del suelo 500 kilogramos de residuos todos los días.
La normativa municipal, y concretamente el decreto --aprobado el pasado 11 de abril-- de desarrollo de la Ordenanza municipal para la recogida de residuos municipales y limpieza de espacios públicos, entiende por "área de influencia" de los 'takeaway' la zona comprendida en una circunferencia de 50 metros de radio alrededor del establecimiento, contado desde sus puertas de acceso.
En este sentido, los locales son los responsables de la limpieza de los espacios públicos que lindan con su fachada exterior y de los alrededores y, asimismo, se les insta a propiciar medidas de concienciación cívica para evitar el abandono inadecuado de los residuos que se generan.
Además de este decreto, se ha informado a los locales de ocio y con terrazas de la prohibición, contenida en la mencionada ordenanza, de depositar en la vía pública los residuos y el agua sucia procedentes de la limpieza del interior y exterior.
Cabe recordar que el abandono o vertido incontrolado de cualquier tipo de residuo puede ser considerado como infracción, con sanciones que van desde los 300 a los 9.000 euros.