PALMA DE MALLORCA, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Técnica Insular de Museos del Consell de Mallorca ha aprobado este martes el reconocimiento como colecciones museográficas los fondos del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (Imedea), situado en Esporles, y los de la finca de Alfbia, en Bunyola.
Así lo ha comunicado este martes la institución insular en una nota de prensa, en la que ha especificado que ya son diez los museos y las colecciones reconocidos por el Consell y que pueden acceder a las ayudas que convoca el Departamento de Cultura, Patrimonio y Política Lingüística.
La vicepresidenta y consellera de Cultura, Patrimonio y Política Lingüística, Bel Busquets, ha destacado que con el reconocimiento de los fondos de Imedea, del campo de las ciencias naturales, y de Alfbia, "cada vez son más las colecciones que cuentan con este distintivo, que es una garantía de calidad, seguridad y accesibilidad para el público y personal investigador".
La nueva colección museográfica del Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados, consta de una exposición permanente 'Gimnsies y Pitiusas: dos mundos aparte' en que, a partir de ejemplares fósiles, presenta algunas de las diferencias faunísticas más notables que había entre estos dos conjuntos de islas cuando fueron colonizadas por los humanos.
Esta muestra quiere divulgar la importancia de las colecciones de ciencias naturales, haciendo énfasis en la evolución desde el origen hasta el presente. A partir de diferentes ejemplares de la colección, se explican momentos importantes de la historia de las Islas.
Además, en el inventario del fondo del Imedea consta una colección de más de 95.000 ejemplares de vertebrados. El conjunto comprende las colecciones paleontológicas (fósiles) y zoológicas (ejemplares actuales), que provienen del territorio de las Islas, áreas circundantes y otras zonas del mundo.
En cuanto a la nueva colección museográfica de Alfbia, se sitúa en el conjunto arquitectónico de esta finca declarado bien de interés cultural, y está ordenada desde el siglo XIX hasta ahora y pensada como una residencia en el campo de una familia noble, especialmente para pasar el verano. Con la exposición permanente de la colección se quiere explicar la manera de vivir en tiempos pasados.
La exposición museográfica se distribuye en siete espacios: entrada, corredor, sala de la biblioteca, sala grande, sala de la silla, sala de la alcoba y tocador. Se presenta un reportaje fotográfico de las salas y los planos del edificio con indicación de las salas que se pueden visitar.
Ambas colecciones, según el Consell insular, cumplen con los requisitos de apertura al público, medidas de seguridad y de accesibilidad para facilitar la investigación y la consulta de los fondos.