Emaya incrementa un 143% las actas levantadas en Medioambiente en Palma

El 54% de las denuncias corresponden a particulares y el 46% a empresas

PALMA DE MALLORCA, 5 Ene. (EUROPA PRESS) -

El Servicio de Inspección Medioambiental de Emaya ha levantado un total de 2.035 actas de denuncia por infracción de las ordenanzas municipales en 2016, lo que supone un incremento del 143% en relación a las 836 denuncias del año 2015.

Según han explicado en un comunicado, más de la mitad de estas denuncias interpuestas por los controladores medioambientales, 1.348, son por abandono de residuos en la calle, fuera de los contenedores o por no depositarlos en el horario establecido.

Le siguen las denuncias relacionadas con los animales de compañía, 285, por abandono de excrementos, llevar animales sin atar u otras infracciones a la ordenanza de animales de compañía.

Otra cuestión que ha sido objeto de sanciones es todo lo relacionado con la recogida de trastos: 196 denuncias por dejarlos en la calle el día u hora no indicado o abandonar objetos que no se recogen con este servicio (mayoritariamente electrodomésticos).

Asimismo, se han levantado 144 actas por ensuciar la vía pública (vertidos, residuos...) y 37 por publicidad dinámica. En menor medida, han sido 25 las denuncias interpuestas por abandono de sacas de material de construcción o mal uso de contenedores de obra.

En total, ha habido 2.035 expedientes sancionadores, 1.348 por residuos (abandono en la calle, fuera contenedores); 285 por animales de compañía; 196 por trastos; 144 por ensuciar la vía pública; 37 por publicidad dinámica y 25 por sacos y contenedores de obra.

Poco más de la mitad de las denuncias se han hecho a particulares, 1.094, que supone un 54%, mientras que el 46% son denuncias a empresas. De estas la mayoría son comercios (390) y bares, cafeterías o restaurantes (258). También se han levantado 97 actas a empresas de construcción, 87 despachos y profesionales y 49 hoteles.

Según explican desde Emaya, este incremento de las denuncias se produjo a partir de abril de 2016, cuando se reestructuró el Servicio de Inspección Medioambiental y se marcó como prioridad de los controladores medioambientales la vigilancia y el levantamiento de actas para denunciar infracciones a las ordenanzas municipales de residuos y limpieza, animales de compañía y publicidad dinámica.