PALMA DE MALLORCA, 26 May. (EUROPA PRESS) -
Un ex directivo de Clesa que ha declarado este viernes como testigo en el juicio contra los hermanos Ruiz-Mateos por la presunta estafa en la compra de dos hoteles ha asegurado que Álvaro Ruiz-Mateos era el administrador único "pero no ejercía" y que su labor se limitaba a "abrir puertas" por sus contactos con otras empresas. "Le veían la cara y ya está", ha dicho el testigo.
El ex directivo ha mantenido que fue José María Ruiz-Mateos padre quien decidió que Álvaro firmase la operación y que el hijo iba "sólo a acompañar". Además, ha defendido que Clesa tenía "solvencia suficiente" para hacer frente a la operación.