"El alcohol es un reclamo" y refuerza la imagen de estos establecimientos como "un espacio de ocio" más, avisan
PALMA, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
Las Federaciones de Asociaciones de Familias de Mallorca (FAPA) y de Asociaciones de Vecinos de Palma consideran que la reforma de la Ley del Juego de Baleares que tramita el Parlament balear debe prohibir la venta de alcohol en los locales de juego y apuestas, dado que "uno de los factores que fomentan un juego de riesgo es el consumo de alcohol".
Así lo expresan en las alegaciones presentadas en el Parlament junto a la Asociación de Rehabilitación de Ludopatía Juguesca, el Instituto Europeo de Estudios en Prevención (Irefrea) y la Plataforma Marratxí Libre de Juegos de Apuestas.
El director de FAPA Mallorca, Miquel ngel Guerrero, ha explicado en declaraciones a Europa Press que "el alcohol es un reclamo" y refuerza la imagen de estos establecimientos como "un espacio de ocio como si fuera un bar", cuando "detrás" hay "atracción" al juego.
Como ha recordado, los expertos en adicciones advierten "del peligro de juntar una droga como el alcohol, que desinhibe, con el potencial adictivo del juego".
REGULAR HORARIOS DE APERTURA HOY "SIN CONTROL"
Ello, unido a que estas casas de juego tienen "horarios sin ningún tipo de control, muchas veces de 24 horas", se convierten en "lugares donde acaban juntándose a ciertas horas" personas con "consumo exagerado de alcohol" que provocan molestias a los vecinos.
Por ello, otra de las alegaciones de las entidades --varias de ellas parte de la Mesa Social del Juego-- es precisamente regular los horarios de apertura, por considerarlos "un factor de riesgo para las adicciones".
Las entidades se muestran conscientes de que se trata de una competencia municipal pero plantean que a nivel autonómico se haga una "regulación marco" para "evitar molestias 24 horas", estableciendo un máximo de horas de apertura diarias e impidiendo que estos locales abran "hasta altas horas de la madrugada".
Igualmente, piden que no se puedan autorizar salas de juego en zonas residenciales y que el listado de lugares con distancias mínimas incluya espacios de ocio como centros culturales, teatros, cines, casales de barrio, bibliotecas, hospitales y otros.
Además, reclaman regular la incompatibilidad de algunas actividades comerciales, como las dirigidas al ocio familiar o infantil. "Tenemos conocimiento de salas de juego que han instalado juegos infantiles en su entrada", han avisado.
Las entidades firmantes de este pliego de alegaciones también solicitan prohibir los elementos publicitarios lumínicos en las fachadas de los locales.
En cuanto a las máquinas tragaperras, las alegaciones solicitan al Parlament que el personal que las gestione tenga formación específica e implementar mecanismos de control de acceso para los autoprohibidos. Para los menores de edad plantean un 'botón de activación' similar al que tienen las máquinas de venta de tabaco.
Asimismo, entre otras consideraciones, consideran que se deben regular las ampliaciones de locales ya autorizados --actualmente afectadas por regulaciones municipales--. "Algunas ampliaciones han significado un aumento de aforo de prácticamente el doble, con efectos similares al de una nueva autorización en un nuevo lugar", han advertido. Por ello proponen que cualquier ampliación que suponga más de un 15% de incremento de la superficie se considere una nueva licencia.