PALMA, 4 Nov. (EUROPA PRESS) -
Baleares está llevando a cabo inversiones por valor de más de 74,7 millones de euros procedentes de los fondos Next Generation del componente 14 en proyectos destinados a las entidades locales para la mejora de la competitividad y la capacidad de adaptación del territorio en el ámbito turístico.
De los proyectos a financiar destaca la adquisición de hoteles obsoletos en zonas turísticas maduras para su demolición y reconversión en espacios verdes, así como la rehabilitación de inmuebles en desuso y deteriorados para su rehabilitación y transformación en espacios con nuevos usos sociales y culturales.
En relación a la oferta turística obsoleta en zonas maduras, en Calvià, el Ayuntamiento quiere adquirir los antiguos Hotel Teix (4,2 millones de euros) y Hostal Colón (1,5 millones de euros), ubicados en Magaluf, calificada como zona de turismo de excesos, y Peguera, identificada como zona saturada y madura, respectivamente, para crear espacios libres públicos aportando regeneración y calidad urbana a un enclave históricamente perjudicado.
De la misma manera, en Manacor está prevista la adquisición de los Apartamentos Topaz, ubicados en el núcleo de Cales de Mallorca, por una inversión total de 4,8 millones de euros, para que un espacio urbanizado pase a ser una zona verde.
En Sant Antoni de Portmany (Ibiza), el Ayuntamiento ejecuta por algo más de un millón de euros la compra de un inmueble en la zona más degradada del casco antiguo para destinarlo a la creación de un espacio cultural que ayude a ofrecer un entorno más atractivo y que se convierta en punto de interés del turismo durante el día.
REHABILITACIÓN DE EDIFICIOS
Por otra parte, hay en marcha un gran número de proyectos para adquirir espacios e inmuebles deteriorados para que tras un proceso de adecuación y rehabilitación puedan albergar nuevos usos sociales, turísticos y culturales.
En este sentido, el Ayuntamiento de Alaior (Menorca) ya ha cerrado la compra de la antigua fábrica de Coinga, que data de 1970, para además de sumar al patrimonio local un inmueble con una destacable historia, albergar, entre otros usos, un palacio de congresos, un auditorio y una sala multifuncional que sirva como atractivo turístico transversal. Este proyecto cuenta con una inversión total de 700.000 euros.
También en Alaior (Menorca), se prevé la compra de cas Corbo, un edificio catalogado desde 2019, para constituir el espacio museístico del Centro de Arte Contemporáneo y contribuir así a la desestacionalización, aumentando la oferta de turismo cultural del municipio, y que se está quedando pequeño en su actual ubicación. El presupuesto para esta actuación es de unos 972.000 euros.
En Sencelles, en la comarca del Pla de Mallorca, el Ayuntamiento quiere comprar la antigua fábrica Osca, un edificio histórico con una arquitectura industrial muy valiosa y ubicado en pleno centro del municipio para convertirlo, tras una inversión prevista de algo más de un millón de euros, en un edificio que preste servicios turísticos a toda la comarca, un servicio que a día de hoy no se da.
El Consell de Ibiza, por su parte, se plantea la adquisición del antiguo Cine Torres por 2,5 millones de euros en Sant Antoni de Portmany para su reconversión en un espacio moderno y acondicionado para la celebración de todo tipo de actos de ocio, culturales, sociales, corporativos y asociativos, de tal manera que se revitalice la zona y el municipio se incluya en los circuitos de turismo de congresos.
Por otra parte, el Ayuntamiento de Sant Llorenç des Cardassar está impulsando, con una dotación de 3,6 millones de euros, la reconversión de las antiguas cocheras de la estación de Son Carrió para albergar el futuro Museo del Ferrocarril de Mallorca, planteado como oferta cultural y turística innovadora y que fomentará una oferta diferenciadora.
Este proyecto, al mismo tiempo, preservará el patrimonio ferroviario de la isla y otros elementos de la historia industrial y creará puestos de trabajo asociados a entidades del tercer sector. Se trata de una zona de baja densidad turística, pero cercana a Cala Millor, uno de los destinos principales de la isla.
En Formentera, una inversión de 1,5 millones de euros, ha permitido el proyecto de urbanización y adecuación del núcleo de Sa Roqueta, que sufre una grave problemática en materia de movilidad, medio ambiente y gestión de residuos. Las actuaciones mejorarán la problemática del núcleo y darán respuesta a las necesidades planteadas.
Todos estos proyectos podrán llevarse a cabo gracias a la Convocatoria de subvenciones para financiar actuaciones para la mejora de la competitividad y la capacidad de adaptación del territorio de las Islas Baleares en el ámbito turístico lanzada por la Dirección General de Turismo durante 2024 y dotada con una inversión de 74 millones de euros, financiada por los fondos Next Generation EU.