Las medidas de conservación que se llevan a cabo en el Parque Natural han favorecido su consolidación
PALMA DE MALLORCA, 22 May. (EUROPA PRESS) - -
Técnicos del Departamento de Medio Ambiente del Consell de Mallorca, junto con personal del Servicio de Especies de la Conselleria de Medio Ambiente, han realizado, en las últimas semanas, el seguimiento de la cría de gaviota roja (Larus audouinii) en el Parque Natural de sa Dragonera.
De este modo, han podido determinar, que la colonia de la isla es estable y se encuentra en buen estado. Este año, están criando en sa Dragonera entre 70 y 80 parejas, en un núcleo denso, según informa la institución insular en un comunicado.
Cabe destacar que la gaviota roja suele cambiar su localización concreta dentro del parque algunos centenares de metros cada temporada, y a veces se desplaza de uno al otro extremo de la isla. Pero desde hace más de 20 años, la colonia es fiel a la isla.
La gaviota roja, especie endémica del Mediterráneo, cría en todas las orillas de este mar (desde Grecia hasta Marruecos), fue considerada durante años la gaviota más rara del mundo debido a su reducida población y en 1988 era catalogada como especie amenazada.
Las medidas de conservación de las que ha sido objeto, ha hecho que el peligro crítico en que se encontraba haya desaparecido y actualmente sea una especie en una situación de preocupación menor.
MARCHA HASTA LA COSTA DE SENEGAL
La gaviota roja nidifica en colonias a finales de la primavera y las crías inician su vuelo a principios de verano, cuando marchan hacia las costas del Senegal de donde no volverán hasta que tienen 4 años que vuelven a las Islas para criar.
Su dieta está basada únicamente en peces y organismos marinos. Es muy habitual que ejemplares de esta especie se dejen ver puestas a calas y playas donde se pueden reconocer claramente por su pico rojo oscuro y las piernas verdes.
Con todo, esta ave sufre, como la mayoría de especies de aves marinas, el impacto de la contaminación, y en especial de los plásticos y de los hilos de pesca perdidos.
En Baleares, nidifica en pequeñas colonias en diferentes lugares del litoral, pero tiene particular preferencia por los islotes, por la tranquilidad que les ofrecen.