PALMA, 4 Sep. (EUROPA PRESS) -
Un abogado que asistió en su declaración judicial a un funcionario del Ayuntamiento de Palma detenido durante la investigación de la causa ORA ha aludido a una "presión clara y evidente" del fiscal Miguel Ángel Subirán a su representado, y ha criticado la falta de reacción del juez Manuel Penalva.
La Sala Civil y Penal del Tribunal Superior de Justicia de Baleares ha retomado este lunes el juicio contra los investigadores del caso Cursach con las declaraciones de más testigos, la mayoría de abogados que representaron a detenidos del caso ORA.
En esta línea, uno de los letrados ha insistido ante el Tribunal que la declaración de su cliente "no tuvo ningún tipo de interés investigador y que era una actuación directamente dirigida a presionarle y a que se autoinculpara".
Según ha añadido durante su testimonio, el abogado ha recordado que, una vez leyeron los derechos a su representado, le preguntaron si quería declarar y él contestó que sí. Esto, ha asegurado el letrado, hizo entrar "en cólera" a Subirán, porque no tenía la declaración preparada.
"Empezó a hacer una traba incriminatoria y fuera de lugar. El juez no hizo nada, su postura fue no reaccionar a esta salida de tono y a presiones por parte del fiscal", ha censurado el abogado, destacando que se quejó a ambos.
Asimismo, durante su discurso ha rememorado que su cliente fue interrogado sin presencia letrada, momento en que le mostraron tres columnas de detenidos, imputados y testigos. "Le dijeron que si él denunciaba o hablaba contra Álvaro Gijón, José María Rodríguez y Toni Roig, podría pasar a testigo", ha contado el abogado.
En esta línea, también ha recordado algunas preguntas "capciosas y malintencionadas" de Subirán hacia su cliente, quien, según ha dicho, supo mantenerse y contestar con "respuestas elaboradas y largas, algunas deshaciendo malos entendidos".
Con todo, ha continuado, estas respuestas "no eran del agrado del Ministerio Fiscal ni del magistrado", y ha imitado una respuesta de Subirán en la que, según el abogado, dijo que solo le interesaba lo que le permitiera acusar. Entonces, el letrado fue a hablar fuera con su cliente y paró la declaración.
Seguidamente, preguntado por el abogado de Penalva y Subirán por qué no indicó que en la declaración de su cliente faltaban cosas, el abogado ha respondido que no le hacían caso.
"No nos hacían caso. Yo protestaba ante el juez de manera verbal, gestual y de todas las posibles que hay, pero él encogía de hombros, pedía colaboración y no tomaba mis quejas en consideración", ha sentenciado.