PALMA DE MALLORCA, 13 Feb. (EUROPA PRESS) -
Un total de 3.619 alumnos de Baleares fueron expulsados el año pasado de su centro educativo, según datos extraídos de la Memoria del Instituto para la convivencia y el éxito escolar recogidos por la Federación de Enseñanza de Comisiones Obreras (FE-CCOO).
Por este motivo, el sindicato ha reclamado al Govern más formación, recursos y herramientas para evitar que los alumnos sufran expulsiones de sus centros.
La mitad de ellos fueron expulsado sin conformidad de las familias y prácticamente la totalidad corresponden a la etapa de secundaria, han explicado.
"Se trata de una cifra que está alrededor del 10 por ciento de los alumnos y desde CCOO encontramos que se tendría que trabajar para corregirla urgentemente", ha lamentado el sindicato.
Asimismo, CCOO ha detectado que los alumnos que sufren estas expulsiones, "acontecen en abandono prematuro de los estudios y son de difícil inserción".
MEDIDAS
Para la FE-CCOO la primera medida debería ser la retirada del puntos, ya que, han asegurado, la expulsión no supone ninguna corrección mientras no se implementen medidas de control y seguimiento que den garantías de éxito.
Igualmente, han pedido que continúen aumentando las políticas que se hacen desde la Conselleria de Servicios Sociales en los centros educativos, como la de incrementar la presencia de educadores sociales a los institutos.