Policía Nacional admite que las conclusiones del informe de la plaza Pitiusas se hizo antes de recabar la documentación

Archivo - El empresario y magnate del ocio nocturno mallorquín Bartolomé Cursach.
Archivo - El empresario y magnate del ocio nocturno mallorquín Bartolomé Cursach. - Isaac Buj - Europa Press - Archivo
Publicado: jueves, 17 noviembre 2022 15:12

Trabajador de Magaluf señala trato de favor al Grupo Cursach: "Quiero que admitan la culpa"

Otra empleada del grupo Magaluf Boulevard, acusación particular en el juicio, narra insultos de Sbert por el conflicto de las vallas: "Quitad a esta zorra de en medio"

PALMA, 17 Nov. (EUROPA PRESS) -

Un agente de la Policía Nacional integrante del Grupo de Blanqueo que realizó un informe sobre la plaza Pitiusas de Magaluf ha admitido, este jueves durante el juicio por el caso Cursach, que las conclusiones las plasmaban antes de recabar la documentación.

Así lo ha asegurado en el juicio que se celebra en la Sección Primera de la Audiencia Provincial de Baleares, donde este jueves han declarado diversos trabajadores de Magaluf Boulevard, entre ellos Javier Pedreira, que ejerce acusación particular junto con el empresario José Manuel Bover por unas vallas que el Grupo Cursach puso a la espalda de la discoteca BCM que supuestamente impedían el plazo de clientes a la plaza Pitiusas.

Durante esta jornada de interrogatorio, la abogada Teresa Bueyes, que lleva esta acusación particular, ha dirigido el interrogatorio tanto a estos empleados como a un empresario de Magaluf, un agente de la Policía Nacional y otro de la Policía Local de Calvi. En total, estaban citados 19 testigos, pero finalmente la sesión ha concluido teniendo que dejar algunos para mañana viernes.

En primer lugar, Pedreira, trabajador de Magaluf, ha señalado trato de favor por parte del Ayuntamiento de Calvi al Grupo Cursach. "Quiero que admitan la culpa, estos hechos pasaron. Si Cursach y Sbert admiten estos hechos y su culpa, no pido ninguna reclamación económica y pena de prisión".

Notablemente emocionado por la deriva económica que ha sufrido en estos años, este hombre ha asegurado que intentó solucionar el conflicto con el director general del Grupo Cursach, Bartolomé Sbert, pero le trataron como "si fuera un payaso". "Se reían de mí, me escupían, me pegaban...", ha añadido.

En concreto, el testigo ha detallado que el Grupo Cursach colocó diferentes vallas entre los años 2014 y 2016 que dividían la plaza Pitiusas. "No estaban situadas siempre en el mismo sitio, se movían a voluntad del Grupo Cursach", ha asegurado.

Además de indicar que su empresa colocaba vallas en invierno para impedir el paso de personas mientras los locales estaban cerrados, ha subrayado que la discoteca BCM, cuyo propietario es el empresario Bartolomé Cursach, empezó un "conflicto comercial con intensidad" por lo que "empezamos a interponer quejas porque se incumplía el plan de evacuación".

Sin embargo, ha afirmado que el Ayuntamiento de Calvi no sancionó pese a que "había incumplimiento de normativa". "Mis sanciones se ejecutaban y a veces esperaba dos horas para tener una reunión, mientras Sbert se reunía nada más llegar", ha asegurado, para después añadir: "El Ayuntamiento cerró la discoteca BCM cuando yo estaba en la más absoluta indigencia".

Respecto a las reuniones en el Ayuntamiento de Calvi, ha destacado que acudía "desesperado" a Jaime Nadal, ex director general de Turismo, Comercio, Actividades y Litoral del Ayuntamiento de Calvi quien está en el banquillo de los acusados pese a que el Ministerio Fiscal no acusa pero sí la acusación particular de Pedreira. "A veces no tenía tiempo para atenderme y me citaba dos semanas después".

Igualmente, ha indicado que el Ayuntamiento empezó a actuar a finales de 2016 y entrado 2017, que era cuando la empresa para que la trabajaba "ya estaba en la ruina". "Las medidas contra las vallas se tomaron en agosto de 2016 y en septiembre me quitaron mi casa. Sólo vengo a pedir justicia porque esto pasó, la administración local no hizo nada", ha asegurado.

De hecho, el testigo ha remarcado que, como consecuencia, sigue en tratamiento por depresión y ansiedad. "Perdí mi hipoteca en Palmanova, mi piso en República Checa, tenía las cuentas embargadas y todavía sigo pagando", ha destacado, para reiterar su petición porque no tiene "ganas de venganza": "No quiero penas de prisión ni para Cursach ni para Sbert, sólo quiero que admitan la culpa".

Leer más acerca de: