PALMA 6 Sep. (EUROPA PRESS) -
El PP ha afeado al delegado del Gobierno en Baleares, Alfonso Rodríguez, por su "falta de empatía y humanidad ante la crisis migratoria" en las Islas.
Así se ha expresado este viernes el portavoz del PP en el Parlament, Sebastià Sagreras, criticando que cuando el Govern y los Consells lanzan un grito de auxilio y el Consell de Mallorca alerta que puede acabar alojando en tiendas de campaña a menores migrantes, Rodríguez "sale a decir que él no piensa asumir su responsabilidad".
La formación 'popular', a través de una nota de prensa, se ha referido a unas declaraciones de este viernes del delegado del Gobierno, en las que ha reclamado a la presidenta del Govern, Marga Prohens, y al presidente del Consell de Mallorca, Llorenç Galmés, que insten al PP nacional a apoyar una reforma de la Ley de Extranjería para el reparto de los menores extranjeros no acompañados.
"Las declaraciones difundidas por Rodríguez Badal, en las que no ha sido capaz ni de salir de su despacho, como es habitual, solo confirman que piensa seguir de perfil como hasta ahora ante la crisis migratoria", ha apostillado Sagreras.
En esta línea, ha cuestionado "a qué se dedica" el delegado del Gobierno puesto que, según ha ironizado, "la falta de personal en la administración del Estado no es cosa suya, los retrasos de prestaciones de la Seguridad Social no es cosa suya, el colapso en la oficinas de Extranjería no es cosa suya, los problemas en Son Sant Joan no es cosa suya y tampoco lo es la crisis migratoria, cuando la competencia de migración es exclusiva del Estado". "¿Qué hace? ¿Por qué cobra lo que cobra?", ha cuestionado.
Según Sagreras, "se cree que solo debe hacer de portavoz del PSOE y de Sánchez". Así, los 'populares' han criticado que con el cambio de la anterior delegada del Gobierno, Aina Calvo, por Rodríguez, la Delegación del Gobierno ha entrado "no solo en absoluta falta de colaboración institucional sino en absoluta parálisis".
Además, ha recordado que se espera su comparecencia en el Parlament y lo ha instado a "asumir sus responsabilidades, dejar de ponerse de perfil, salir de su despacho, ponerse a trabajar y afrontar la crisis migratoria en Baleares".