PALMA 13 Mar. (EUROPA PRESS) -
Un total de 25 alcaldes han dado apoyo al manifiesto de la Obra Cultural Balear (OCB) que pide al Consell de Mallorca que no cambie la fecha del 31 de diciembre para celebrar la Diada de Mallorca por el 12 de septiembre.
En un comunicado este miércoles, la OCB ha informado que el posicionamiento de los alcaldes se suma al que han hecho 100 historiadores y a las miles de firmas que se han registrado en la institución insular para reclamar la fecha del 31 de diciembre para celebrar la Diada de Mallorca.
Según ha destacado el presidente de la entidad, Antoni Llabrés, teniendo en cuenta la "oposición" que ha provocado la decisión del Consell, la OCB insiste en pedir al presidente insular, Lloren Galmés, que "reconsidere su postura y la de su partido y que no se deje arrastrar por los delirios de un partido antimallorquín de extrema derecha que solo busca destruir la identidad de los mallorquines".
Los municipios que han firmado el manifiesto, de distintos colores políticos menos del PP, son Algaida, Ariany, Art, Banyalbufar, Búger, Campanet, Consell, Costitx, Dei, Esporles, Fornalutx, Inca, Lloret, Lloseta, Llubí, Manacor, Monturi, Pollena, Porreres, Puigpunyent, Sa Pobla, Sant Joan, Santa Eugnia, Santa Maria y Sencelles.
Desde la OCB han considerado que "la presencia de un número tan plural de alcaldes de toda la isla demuestra que se trata de una Diada de todos los mallorquines y en la que se identifica la Part Forana".
Igualmente, han hecho hincapié en que el cambio de fecha ha sido rechazado por la oposición política en la institución insular, por buena parte de los alcaldes de Mallorca y por especialistas en la materia que consideran que el 31 de diciembre es la fecha histórica desde el siglo XIII.
"Los historiadores manifiestan que el 31 de diciembre representa la voluntad de continuidad con la identidad histórica, cultural y lingüística que representó al Reino de Mallorca, que es la Diada con la que se identifican la mayoría de los ciudadanos, personalidades relevantes y organizaciones de la historia y que no puede ser sustituida por una fecha sin trascendencia histórica, como es la sucesión de un monarca por otro, que no alteró la esencia jurídica y social del Reino de Mallorca", señala la OCB.
La entidad presentó alegaciones contra el cambio de fecha y, en palabras de Llabrés, acusó al gobierno de PP y Vox de "crear una fiesta por razones sólo políticas y con la intención de borrar del imaginario colectivo el momento fundacional y diluir los orígenes del pueblo de Mallorca".
Con todo, la OCB pide a Galmés que reconsidere su postura y que en el pleno de este jueves, en el que se debate la aprobación definitiva del acuerdo, rectifique y se mantenga el 31 de diciembre como la Diada de Mallorca.