MADRID 18 Abr. (EUROPA PRESS) -
Save the Children ha advertido este jueves de que cerca de 250.000 niños en Afganistán necesitan alimentos, hogar y educación tras regresar de Pakistán, después de que este Gobierno anunciara en octubre de 2023 que los "inmigrantes ilegales" debían abandonar el país.
Según una encuesta realizada por la ONG, casi la totalidad (el 99%) de las familias que han regresado a Afganistán en los últimos meses no tienen suficiente comida para los próximos dos.
El estudio revela que la mayoría de retornados depende de parientes o amigos para su manutención: alrededor del 40% pidieron comida durante al menos tres días a la semana, mientras el 13% de éstos y el 9% de las familias de acogida tuvieron que hacerlo todos los días. Asimismo, estas personas se vieron obligadas a reducir o restringir el número de raciones de comida al día.
Además, cerca de ocho millones de niños, lo que supone uno de cada tres, se enfrentan a niveles críticos de hambre, lamenta la ONG.
Save the Children calcula, además, que aproximadamente una de cada seis de estas familias vive en tiendas de campaña, con pocos o ningún medio de subsistencia, puesto que solo una de cada tres ha conseguido traer consigo bienes desde Pakistán.
"Las familias regresan a Afganistán prácticamente sin nada. El regreso de tantas personas está creando una necesidad adicional sobre unos recursos ya desbordados", ha alertado el director de Save the Children en Afganistán, Arshad Malik.
Por otra parte, según el 47% de los encuestados, no hay trabajo disponible en Afganistán, y el 81% carece de una cualificación que le permita conseguir un empleo.
El 65% de los niños que han regresado a Afganistán no están escolarizados. La mayoría (85%) aseguran que no tienen los documentos necesarios para inscribirse y matricularse en la escuela. En Pakistán, más de dos tercios de estos niños habían estado escolarizados.
"Los niños y niñas afganos necesitan apoyo y estabilidad. Muchos de los indocumentados nacieron en Pakistán; Afganistán no es el lugar al que llaman hogar", ha declarado el representante de la ONG en el país.
Más de 520.000 afganos, casi la mitad menores de edad, han abandonado Pakistán, después de que este Gobierno anunciara que los residentes extranjeros sin documentación tenían que marcharse voluntariamente o, de contrario, se enfrentarían a la deportación.
La medida se tomó en medio de un aumento de la violencia y los ataques terroristas, en especial en las zonas fronterizas con Afganistán.
Además de los retornados de Pakistán, 600.000 afganos llegaron de Irán el año anterior. Afganistán es el segundo país del mundo con mayor número de desplazados internos, aproximadamente una de cada siete personas.