Refugiados sirios en Líbano
REUTERS / ALI HASHISHO
Publicado: martes, 9 enero 2018 15:33


MADRID, 9 Ene. (EUROPA PRESS) -

Más de la mitad de los refugiados sirios en Líbano vive en la pobreza extrema, un 5 por ciento más que en 2016, según los resultados de la encuesta de evaluación anual de la vulnerabilidad de los refugiados sirios (VASyR) realizada por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), el Fondo de las Naciones Unidas para la infancia (UNICEF) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA), que han denunciado la extrema vulnerabilidad en la que viven.

Siete años después del comienzo de la guerra en Siria, a los refugiados en Líbano les resulta cada vez más difícil llegar a fin de mes y su dependencia de la ayuda internacional continúa en aumento. La investigación, cuyos resultados ha presentado este martes en Ginebra el portavoz de ACNUR, William Spindler, se ha llevado a cabo entrevistando a unas 5.000 familias de refugiados, seleccionados al azar, de 26 distritos en todo Líbano.

La encuesta ha revelado que el 58 por ciento de los hogares viven en la pobreza extrema, con menos de 2,40 euros por persona y día, lo que supone aumento del 5 por ciento con respecto a la encuesta de 2016.

El número de familias que viven por debajo del umbral de la pobreza --menos de 3,21 euros al día-- también ha seguido aumentando. El 76 por ciento de los hogares de refugiados viven por debajo de este nivel, lo que significa que más de las tres cuartas partes de los refugiados sirios en Líbano viven con menos de 3 euros al día, con un gasto medio de 82 euros por persona al mes, de los cuales 36 euros se gastan en comida.

La inseguridad alimentaria también sigue siendo críticamente alta, afectando en cierta medida al 91 por ciento de los hogares. Pero las vulnerabilidades también están creciendo en otros lugares. Obtener residencia legal sigue siendo un desafío, dejando a los refugiados expuestos a un mayor riesgo de arresto, obstaculizando su capacidad para registrar sus matrimonios y dificultando su búsqueda de trabajo diario, enviar a sus hijos a la escuela o acceder a la atención médica, ha explicado el portavoz de ACNUR.

Según los resultados de la encuesta, solo el 19 por ciento de las familias tienen a todos sus miembros con residencia legal, frente al 21 por ciento que disfrutaba de estas condiciones en 2016. La proporción de hogares donde nadie tiene residencia legal también ha aumentado considerablemente, el 74 por ciento de los refugiados sirios encuestados, de 15 años o más, no cuentan con residencia legal en Líbano.

"Tomado en su conjunto, los resultados del estudio dibujan una imagen alarmante de las crecientes vulnerabilidades a las que se enfrentan los refugiados sirios en Líbano", ha resaltado Spindler. "Tras siete años de crisis, dependen cada vez más de la ayuda humanitaria", ha lamentado, precisando que más de dos terceras partes aseguraron haber recibido algún tipo de asistencia en los tres meses anteriores.