MADRID, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ha felicitado a Joe Biden tras asumir el cargo como presidente de Estados Unidos y le ha trasladado su deseo de "trabajar por la paz y la estabilidad", en medio del deterioro del conflicto palestino-israelí por las políticas de la Administración de Donald Trump.
"Esperamos trabajar juntos por la paz y la estabilidad en la región y el mundo", ha señalado Abbas, quien ha mostrado su disposición a entrar en un proceso de paz "exhaustivo y justo" que "satisfaga las aspiraciones del pueblo palestino a la libertad y la independencia".
El mandatario ha apostado durante los últimos meses por lanzar un proceso de paz mediado internacionalmente y ha rechazado el papel de la Administración Trump al considerar que está sesgado a favor de los intereses de Israel y que van contra las resoluciones internacionales sobre la materia.
Así, Trump dio importantes espaldarazos al Gobierno de Israel, incluido el reconocimiento en 2017 de Jerusalén como capital de Israel, y ha presentado una propuesta conocida como 'acuerdo del siglo' como base de las negociaciones, rechazada por las autoridades palestinas al considerar que beneficia a Israel y viola las resoluciones internacionales y la solución de los dos estados.
En este sentido, las autoridades palestinas han expresado su deseo de que Biden cambie el rumbo de estas políticas una vez llegue a la Casa Blanca. "Somos optimistas respecto a la nueva Administración en Washington", dijo a finales de noviembre el ministro de Exteriores palestino, Riyad al Malki.
Por otra parte, la Autoridad Palestina ha criticado la decisión de las autoridades israelíes de aprobar permisos para la construcción de cerca de 2.600 unidades de vivienda en asentamientos en Jerusalén Este y Cisjordania, un día antes de la salida de Trump la Casa Blanca de Trump.
El portavoz de la Presidencia palestina, Nabil Abú Rudeina, ha dicho que el Gobierno israelí "corre contra el tiempo para eliminar cualquier posibilidad que quede de lograr la solución de dos estados y poner más obstáculos en el camino de la nueva Administración estadounidense".
Así, ha argumentado que Israel busca "obstruir cualquier esfuerzo" por parte de las nuevas autoridades estadounidenses "para reiniciar el largamente obstaculizado proceso de paz" entre israelíes y palestinos, según ha recogido la agencia palestina de noticias WAFA.
"La continuación del Gobierno de (el primer ministro israelí, Benjamin) Netanyahu con su política de asentamientos y robo de tierras palestinas, con el apoyo y sesgo de la Administración estadounidense, no dará seguridad ni estabilidad", ha sostenido.
Por ello, Abú Rudeina ha reclamado a Biden que adopte una "posición clara" contra la construcción en los asentamientos. A las críticas se ha sumado el Gobierno de Jordania, que ha alertado de que la decisión amenaza los esfuerzos de paz, tal y como ha informado el diario 'The Jordan Times'.
En este sentido, el portavoz del Ministerio de Exteriores jordano, Daifalá Fayez, ha incidido en que los asentamientos son ilegales desde el punto de vista del Derecho Internacional y ha añadido que socava la posibilidad de lograr una solución fundamentada en los dos estados.
Cisjordania --incluida Jerusalén Este--, la Franja de Gaza --de la que Israel se retiró en 2005-- y los Altos del Golán fueron ocupados militarmente por Israel en la guerra de 1967, por lo que la construcción de asentamientos y la colonización de estos territorios supone un crimen de guerra desde el punto de vista del Derecho Internacional.
En total en Cisjordania viven unos 531.000 colonos judíos, según datos de 2012, parte en colonias consideradas legales por Israel y parte en asentamientos considerados ilegales incluso por el Gobierno israelí. Las cifras actuales podrían ser superiores.