MADRID 14 Ene. (EUROPA PRESS) -
El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ha pedido ayuda a su homólogo ruso, Vladimir Putin, para que Donald Trump no cumpla con su promesa y traslade la Embajada estadounidense desde Tel Aviv a Jerusalén una vez que acceda al cargo de presidente de Estados Unidos el próximo 20 de enero.
Una delegación palestina, liderada por el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Saeb Erekat, ha viajado a Moscú para transmitir este mensaje, que el propio Abbas ya trasladó al republicano estadounidense en una carta en la que explicó que este paso "tendría consecuencias destructivas en el proceso de paz, la solución de los dos estados y la seguridad de la región".
Erekat se ha reunido con el ministro de Asuntos Exteriores ruso, Sergei Lavrov, y con otros altos cargos del Gobierno ruso, encuentro tras el cual han ofrecido una rueda de prensa conjunta, tal y como ha informado el diario israelí 'Yedioth Ahronoth'.
"He venido con un mensaje urgente de Mahmud Abbas", ha explicado Erekat, desde la capital rusa. "Le pedimos al presidente (Vladimir) Putin que utilice todas las herramientas de que disponga para impedir que Trump traslade la Embajada porque, para nosotros, este paso sería cruzar la línea roja", ha añadido.
Por su parte, Lavrov ha asegurado que está interesado en ayudar a poner fin al conflicto entre Israel y Palestina, y ha anunciado que hará "todo lo posible" para lanzar "conversaciones directas y sustanciales" entre ambas partes.
"Como ya sabéis, estábamos dispuestos a acoger la cumbre entre los líderes de Israel y Palestina en septiembre del año pasado y seguimos dispuestos a hacerlo una vez que ambas partes estén preparadas", ha añadido.
Desde la victoria de Trump en las elecciones presidenciales de noviembre, el magnate ha revelado su intención de reubicar la Embajada de Tel Aviv en Jerusalén.
Voces como las del secretario de Estado saliente, John Kerry, han alertado del peligro de este gesto porque provocaría "una explosión, una tremenda explosión en la región; no solo en Cisjordania e Israel, sino en toda la región".
En este contexto, James Mattis, elegido por Trump para el cargo de secretario de Defensa, reafirmó este jueves que la capital de Israel es Tel Aviv.
JERUSALÉN, CIUDAD DIVIDIDA
El Gobierno israelí tiene su sede en Jerusalén, que describe como su capital, si bien la mayoría de sus oficiales militares se encuentran en Tel Aviv.
Recientemente, el presidente estadounidense, Barack Obama, renovó la exención presidencial que aplazaba nuevamente la recolocación de la Embajada durante seis meses.
En su decisión, Obama citó "intereses de seguridad nacional" para prolongar la exención a la decisión del Congreso en 1995 de reconocer Jerusalén como capital de Israel y trasladar allí la Embajada.
Estados Unidos no ha reconocido oficialmente Jerusalén como capital del país, a pesar de que Israel así lo reclama, debido a que el Derecho Internacional considera la ciudad dividida.
Israel afirma que Jerusalén es la capital del país, mientras que Palestina reclama que Jerusalén Este sea su capital una vez se cree como Estado.