Abbas recalca que "Jerusalén y Palestina no están a la venta" y rechaza cambios al 'statuo quo'

MADRID, 9 Jun. (EUROPA PRESS) -

El presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, ha destacado que "Jerusalén y Palestina no están a la venta" y ha reiterado que "no permitirá ni aceptará cambio alguno" al 'statu quo' legal e histórico de la ciudad, en medio del repunte de las tensiones durante las últimas semanas.

"Hemos desarticulado todos los proyectos sospechosos para liquidar la causa palestina, particularmente el 'acuerdo del siglo'", ha manifestado, en referencia a la propuesta presentada en 2020 por el entonces presidente estadounidense, Donald Trump, para solucionar el conflicto palestino-israelí.

Así, ha reseñado que las autoridades palestinas continúan su "defensa de la narrativa religiosa e histórica frente a la falsa narrativa de la ocupación, que no tiene base ni en la Historia, ni en la realidad ni en el Derecho Internacional", según ha informado la agencia palestina de noticias WAFA.

"Permanecemos en nuestra tierra y en nuestros lugares santos, defendiendo nuestro derecho inalienable y manteniendo el respeto y el compromiso al 'statu quo' histórico en la Mezquita de Al Aqsa y Jerusalén, con todos sus lugares santos", ha subrayado Abbas.

Por último, ha hecho hincapié en que "el conflicto con la ocupación es un conflicto político y no uno con una religión en particular". "Mantendremos nuestras posiciones, nuestra lucha y nuestra resistencia popular hasta que se establezca el Estado de Palestina como Jerusalén Este como capital eterna"; ha zanjado.

Las palabras de Abbas llegan en el marco del aumento de las tensiones de las últimas semanas tras la muerte de 15 personas en ataques ejecutados en marzo en Israel. El Ejército y las fuerzas de seguridad israelíes incrementaron las redadas en Cisjordania, donde más de 30 palestinos han muerto en operaciones desde finales de ese mes.

A primera hora de este jueves, al menos cuatro palestinos han resultado heridos de bala en operaciones llevadas a cabo por las fuerzas israelíes en las localidades cisjordanas de Nablús y Yenín, tal y como han señalado fuentes de seguridad palestinas.