Rusia ve en la región uno de sus principales aliados
MADRID, 21 Nov. (EUROPA PRESS) -
Las autoridades de la república de Abjasia, independiente 'de facto' de Georgia con el apoyo de Rusia, han informado este jueves de que las elecciones presidenciales anticipadas se celebrarán durante los primeros diez días de febrero, antes de finalice el plazo estipulado por la legislación abjasia, que da de fecha límite hasta el día 19.
La Comisión Electoral Central ha aclarado que el Parlamento debe anunciar la fecha de los comicios en un plazo de 15 días desde la dimisión del presidente, Aslan Bzhania, que presentó su renuncia el martes para poner fin a los disturbios registrados desde la semana pasada en la región, donde grupos de opositores asaltaron la sede del poder legislativo en el marco de las protestas contra una acuerdo con Moscú para fomentar las inversiones rusas.
El organismo electoral ha aclarado que, de no haberse producido la dimisión, las elecciones podrían haberse celebrado entre enero y marzo, teniendo en cuenta los plazos desde el final del mandato de Bzhania, que estaba a punto de cumplir sus cinco años al frente del país, según informaciones del portal de noticias Abkhazinform.
No obstante, el expresidente saliente abjasio ha indicado que los comicios tendrán lugar a principios de febrero y que la fecha límite será el día 19, al tiempo que ha matizado que no se arrepiente de su decisión.
Así, ha hecho hincapié en la importancia de que no se haya incurrido en un derramamiento de sangre durante las protestas. "El uso de la fuerza es una medida extrema, no tiene marcha atrás. Cuando llega a derramarse sangre, no hay manera de enmendarlo. Ahora, en cambio, ha sido posible revertir la situación", ha declarado.
Es por ello que ha reivindicado la posibilidad de que la población exprese su voluntad nuevamente en las urnas y ha asegurado que la situación "se ha calmado". "No se puede decir aún que se haya encauzado, habrá que trabajar en ello, pero todo está en aparente calma por ahora", ha afirmado.
RUSIA VE EN LA REGIÓN UNO DE SUS PRINCIPALES ALIADOS
Este mismo jueves, las autoridades de Rusia han asegurado que están siguiendo de cerca los acontecimientos en Abjasia y han destacado el acuerdo alcanzado por las autoridades y la oposición, que consideraba que el acuerdo que se iba a ratificar provocaría un aumento de los precios de las viviendas y supondría un riesgo para las pequeñas y medianas empresas.
La portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, Maria Zajarova, ha recalcado que la región es uno de sus "aliados y socios más cercanos" y ha recalcado que se deben dar las condiciones para un proceso electoral propicio.
En este sentido, ha instado a la población a elegir a un jefe de Estado que pueda garantizar una convivencia "seguridad, estable y basa en el progreso" para la zona. "Partimos de la base de que cuentan con una buena relación con Rusia, que sigue siendo garante de su soberanía e independencia", ha zanjado.
Zajarova ha aprovechado la ocasión para descartar que Moscú esté tratando de injerir de forma alguna en la política interna de Georgia, que también atraviesa un momento de crispación política a raíz de las elecciones celebradas el pasado mes de octubre, y en las que el gubernamental partido Sueño Georgiano --más cercano a Rusia-- se hizo con la victoria por un estrecho margen.
"Las acusaciones son absolutamente infundadas y las rechazamos rotundamente. Quisiera recordar a quienes hacen tales declaraciones que no tenemos relaciones diplomáticas con Georgia. Rusia desarrolla principalmente vínculos comerciales, económicos y humanitarios con este país, con cuyo pueblo nos une una historia común, una cultura, estrechos vínculos y contactos entre personas", ha aseverado.
Georgia y Rusia mantuvieron una breve guerra por Osetia del Sur y la región de Abjasia en 2008. Tras acabar el conflicto, Moscú, cuyas fuerzas se impusieron, reconoció a ambas regiones como países independientes, si bien la inmensa mayoría de los países no lo han hecho y el Gobierno georgiano sigue considerándolas regiones autónomas bajo su propia soberanía. Actualmente, militares rusos y abjasios garantizan la seguridad en la región.