Archivo - Trabajadores humanitarios procesan cupones para desplazados internos en el campo de desplazados iternos de Otash, en Darfur del Sur, Sudán
Archivo - Trabajadores humanitarios procesan cupones para desplazados internos en el campo de desplazados iternos de Otash, en Darfur del Sur, Sudán - Europa Press/Contacto/Gregg Brekke - Archivo
Actualizado: viernes, 2 junio 2023 12:58

La agencia alerta también de la situación de los refugiados que huyen a Chad

MADRID, 2 Jun. (EUROPA PRESS) -

El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha advertido del riesgo de la seguridad que corren los refugiados que se encuentran atrapados en el conflicto de Sudán por la limitación de las ayudas humanitarias con motivo de los enfrentamientos entre el Ejército sudanés y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF).

"La situación de seguridad está obstaculizando significativamente nuestra capacidad para llevar a cabo actividades humanitarias en Jartum más allá de una mínima supervisión de la protección por teléfono a través de voluntarios de divulgación comunitaria", ha explicado la representante adjunta de ACNUR en Sudán, Fatima Mohammed Cole.

"Todos nuestros intentos anteriores de llegar a la capital y ayudar allí a los refugiados han fracasado hasta ahora y nuestras dos oficinas en Jartum han sido saqueadas", ha indicado.

Así, ha indicado que, aunque el número de refugiados en Jartum ha disminuido significativamente desde el inicio del conflicto, les "preocupa especialmente la difícil situación" de estos en la capital del país, puesto que los que siguen presentes "se enfrentan a una situación desesperada, que va desde problemas de seguridad hasta el acceso a alimentos y servicios básicos".

En este sentido, tanto la situación de los refugiados como de los civiles se ve amenazada, además, por el aumento de las denuncias de abusos contra los Derechos Humanos. Mientras, alrededor de 150.00 refugiados han abandonado Jartum "para reasentarse en condiciones peligrosas" en otros estados como Nilo Blanco, Gedaref, Kassala, Jazira y Port Sudán.

Así, ha denunciado los informes sobre robos, amenazas y violencia física y sexual contra los refugiados, pese a que esta agencia no ha podido corroborar las denuncias "debido a la continua situación de la seguridad". Es por ello que ACNUR ha reiterado su llamamiento para que se garantice la protección de todos los civiles.

"Preocupa especialmente la situación de los más vulnerables, como las mujeres, los niños, las personas mayores, los refugiados con problemas médicos y las personas con discapacidad", reza un comunicado.

Con motivo de la creciente vulnerabilidad de los refugiados en todo el país, la agencia está ampliando las campañas de información para alertar sobre los peligros de la trata y el tráfico de personas. "Estamos vigilando los principales pasos fronterizos de Sudán y seguimos trabajando con los gobiernos vecinos para garantizar el acceso a los civiles que huyen", continúa la misiva.

LOS REFUGIADOS QUE LLEGAN A CHAD TAMBIÉN REQUIEREN AYUDA URGENTE

Por otro lado, han pedido a la comunidad internacional que ayude "urgentemente" a los refugiados que han llegado a Chad, que limita al este con Sudán, país con el que comparte más de 1.300 kilómetros de frontera.

Desde el inicio del conflicto en Sudán, que estalló el 15 de abril, más de 100.000 refugiados han llegado a Chad, la mayoría de ellos procedentes de la inestable región de Darfur, que sufrió un genocidio en 2003.

La representante de ACNUR en Chad, Laura Lo Castro, ha explicado que están trabajando para construir nuevos refugios e infraestructuras, y que están empezando a construir nuevos campos, al tiempo que ha subrayado la necesidad de logística nueva para trasladar a los refugiados para su seguridad y protección de cara a la temporada de lluvias.

"Hemos estado trabajando sin descanso proporcionando servicios de protección, incluida la asistencia especializada a supervivientes de la violencia y niños en situación de riesgo, construyendo pozos de sondeo, instalando letrinas de emergencia, dirigiendo clínicas móviles, organizando convoyes de reubicación complejos", ha indicado Lo Castro.

"Para las familias desarraigadas por la crisis, la asistencia humanitaria es su faro de esperanza. Confiamos en la compasión y la generosidad de nuestros socios para unirnos y garantizar la provisión de protección crítica y apoyo vital. Juntos, podemos salvar vidas y devolver la dignidad a quienes lo necesitan desesperadamente", ha manifestado.

Tanto ACNUR como sus socios han vuelto a pedir que se respete el alto el fuego entre las partes del conflicto para que las personas atrapadas puedan trasladarse a lugares más seguros y para que la ayuda humanitaria pueda llegar a quienes la necesitan.

Más noticias

Leer más acerca de: