MADRID, 15 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR) ha celebrado la sentencia del Tribunal Supremo británico que declara ilegal el plan del Gobierno para deportar a migrantes a Ruanda y ha aprovechado para recordar su "profunda preocupación" por cualquier iniciativa que implique la "externalización" de las obligaciones que les corresponden a los Estados en materia de asilo, en la medida en que puede exponer a los refugiados a "graves riesgos".
ACNUR no interpuso ningún recurso en este proceso, pero sí que ha asesorado a la corte sobre cuáles deben ser los estándares en materia de protección, como ha explicado la propia agencia, en un comunicado en el que ha reconocido que la migración irregular implica "desafíos" pero en el que ha llamado también por otras alternativas a la deportación indiscriminada a terceros países.
Así, ha propuesto la "cooperación" con otros vecinos europeos, por procedimientos de asilo "justos y rápidos" y por un retorno "seguro y digno" de aquellas personas que, una vez revisada la solicitud, no tengan derecho a quedarse. También ha llamado a atajar las causas que subyacen en el desplazamiento y a ofrecer "alternativas reales" a unos viajes que terminan siendo "peligrosos" para quienes los emprenden.
Más de 220 migrantes han muerto en aguas del canal de la Mancha desde el año 2014, 14 de ellos este año, según la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).
El Tribunal Supremo de Reino Unido ha rechazado este miércoles el último recurso del Gobierno de Rishi Sunak entre otras razones porque cree que el plan no examina a fondo si Ruanda puede considerarse un país seguro ni ofrece suficientes garantías de que, por ejemplo, los migrantes no puedan ser deportados en un futuro a las zonas de las que previamente habían escapado.