GINEBRA, 5 Nov. (Reuters/EP) -
El portavoz del Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados (ACNUR), William Spindler, ha afirmado este jueves que el número de refugiados que lleguen a Europa durante 2015 podría llegar al millón, si continúa el ritmo actual de entradas.
"Tenemos que prepararnos para la posibilidad de que cerca de 5.000 sigan llegando cada día desde ahora hasta febrero del año que viene. Si este fuera el caso, contemplamos la llegada de 600.000 refugiados e inmigrantes entre noviembre y febrero de 2016", ha dicho.
Así, ha recalcado que este ritmo de entradas "pondría la cifra en más de un millón durante este año". Alrededor de 760.000 personas han cruzado ya el Mediterráneo, principalmente hacia Grecia e Italia, tras huir de las guerras en Siria, Irak y Afganistán, así como de otros conflictos en África.
En 2014, 216.000 personas llegaron al continente por vía marítima buscando asilo, una cifra equivalente al número de entradas durante el mes de octubre de este año.
"Si no tomamos las medidas necesarias, tememos que más gente muera debido (...) a las duras condiciones del invierno en Europa. Ya hemos visto varios hundimientos en las costas griegas y tememos que la gente pueda morir en el camino entre Grecia y el centro y norte de Europa", ha valorado Spindler.
Más de 3.400 inmigrantes han muerto intentando llegar a Europa por vía marítima en lo que va de año. Este mismo jueves, un niño ha muerto y otro ha sido dado por desaparecido tras un naufragio frente a la isla griega de Kos.
ACNUR ha solicitado a los países donantes 96,15 millones de dólares (88,4 millones de euros) para sufragar sus actividades de cara al invierno. Con esta cifra, el llamamiento de emergencia de la organización asciende ya a los 172,7 millones de dólares (unos 158,7 millones de euros).
La organización adaptará los refugios y centros de recepción ya existentes y aumentará el reparto de ayuda básica para combatir el frío para incluir ropa de abrigo y mantas. No en vano, no en todas las zonas los refugiados se mueven en autobuses y trenes, sino que llegan a caminar largas distancias antes de poder llegar a una nueva parada.
Dentro de su plan de "invernización", ACNUR también ha considerado clave preparar las instalaciones de agua y las redes de saneamiento para evitar la congelación de las tuberías o garantizar un suministro alternativo.