ACNUR exige a Birmania el retorno seguro de los rohingya dado el agravamiento de su crisis por el coronavirus

Refugiados rohingya
Refugiados rohingya - Herwin Bahar/ZUMA Wire/dpa
Publicado: viernes, 21 agosto 2020 14:34


MADRID, 21 Ago. (EUROPA PRESS) -

La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha exigido este viernes a las autoridades birmanas que garanticen el retorno seguro de los refugiados rohingya a su país, tal y como prometieron, dado que la situación del casi millón de refugiados en Bangladesh se ha agravado en las últimas semanas por la pandemia de coronavirus.

Tres años después de que los rohingya se vieran obligados a abandonar sus hogares en el estado birmano de Rajine por la persecución del Ejército, ACNUR ha avisado de que la crisis que atraviesan ha pasado a una nueva dimensión por la pandemia que amenaza los campos de refugiados de Bangladesh, en especial el de Cox's Bazar, donde hay registrados unos 860.000 miembros de esta minoría, nueve de cada diez refugiados rohingya en Asia-Pacífico.

ACNUR ha dado la voz de alarma en un momento en que Bangladesh ha registrado ya más de 290.000 casos de coronavirus y 3.861 fallecidos, mientras el número de casos diarios se mantiene en los niveles del mes pasado, con casi 3.000 en las últimas horas.

Dada la difícil situación, la "generosidad" exhibida por Bangladesh "debe recompensarse a través de la inversión constante en estas comunidades, tanto rohingya como bangladeshí", ha afirmado el portavoz de ACNUR, Andrej Mahecic, durante una rueda de prensa en el Palacio de las Naciones de Ginebra (Suiza), antes de reconocer que esta inyección económica no es más que un parche de cara a la verdadera solución a la crisis de los rohingya, que "descansa sobre los hombros de Birmania".

"La creación de condiciones propicias para el retorno seguro y sostenible del pueblo rohingya requerirá el compromiso de toda la sociedad birmana", según el portavoz. Entre estas condiciones, reguladas en acuerdos previos de retorno prometidos por Birmania, figuran el levantamiento de las restricciones a la libertad de movimiento, la confirmación de que los rohingya desplazados internos pueden regresar a sus propias aldeas y la proporción de un camino claro hacia la ciudadanía.

"La fuerza y la resistencia del pueblo rohingya en el exilio en Bangladesh y en otros lugares han formado la columna vertebral de la respuesta humanitaria durante los últimos tres años y han apoyado a las comunidades que los acogen a su vez", según el portavoz. "Respetar y reconocer su valentía y su capacidad significa asegurarse de que no se olviden de ellos cuando la crisis entra en su cuarto año", ha añadido.