Sirios se manifiestan en Alemania tras la caída del régimen del presidente Bashar al Assad - Europa Press/Contacto/Nicholas Muller
"Cualquiera que busque protección internacional debe poder acceder a los procedimientos de asilo y que su solicitud sea examinada", según ACNUR
MADRID, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -
La Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) ha instado a que se sigan examinando las solicitudes de asilo de los sirios después de que varios países europeos hayan suspendido de forma temporal su tramitación tras la caída el fin de semana del régimen del presidente de Siria, Bashar al Assad.
"A la luz de una situación incierta y sumamente cambiante, la suspensión de la tramitación de las solicitudes de asilo de los sirios es aceptable siempre y cuando que las personas puedan solicitar asilo y puedan presentar solicitudes", ha señalado en una declaración remitida a Europa Press.
ACNUR ha "tomado nota" así de la decisión de varios países europeos de suspender todos los procedimientos de aquellas solicitudes de asilo presentadas por ciudadanos sirios tras la caída de Al Assad, que ha huido del país y se encuentra ya en Rusia.
En este sentido, ha recalcado que los solicitantes de asilo sirios que esperan una respuesta deben seguir teniendo "los mismos derechos" que el resto de personas. "Ningún solicitante de asilo debe ser devuelto por la fuerza", ha agregado.
"Cualquiera que busque protección internacional debe poder acceder a los procedimientos de asilo y que su solicitud sea examinada de forma completa e individual en función de sus méritos de acuerdo con las garantías procesales apropiadas", ha recordado.
La agencia de la ONU también ha afirmado que por el momento "no está en condiciones de brindar orientación" a los países sobre los "factores de riesgo" de los solicitantes de asilo sirios. Por ello, ACNUR proporcionará esta información a los Estados "una vez que las condiciones estén claras".
La caída del régimen de Al Assad ha tenido lugar a raíz de la ofensiva relámpago lanzada por yihadistas y rebeldes, que provocó un continuado repliegue de las tropas gubernamentales, apoyadas por Rusia e Irán, hasta la huida el domingo del que fuera presidente del país desde el año 2000 de la capital ante el colapso de sus fuerzas.