Grupos de activistas y ONG denuncian que los bombardeos están provocando bajas civiles
MADRID, 9 Oct. (EUROPA PRESS) -
Aeronaves de las Fuerzas Armadas de Estados Unidos han atacado este miércoles las posiciones de los milicianos de Estado Islámico en Mosul, la segunda ciudad más importante de Irak, situada en el norte y en la que el grupo terrorista tiene su centro de operaciones, según ha informado el diario estadounidense 'The Washington Post'.
Las Fuerzas Armadas norteamericanas han asegurado que esta operación, que ha destruido cuatro vehículos militares y ha dejado dañados otros dos, supone un cambio significativo en los ataques de la coalición, que hasta ahora se habían alejado de las zonas pobladas para evitar bajas civiles.
"En este caso concreto, (la operación) reúne los criterios para lanzar el ataque", ha afirmado un alto cargo del Departamento de Defensa estadounidense, antes de explicar que el ataque ha tenido lugar en las proximidades de la Universidad de Mosul, uno de los mayores centros educativos de Oriente Próximo.
Por otra parte, el Mando Central estadounidense (USCENTCOM) ha informado de que ha efectuado un ataque aéreo al noroeste de la ciudad de Ramadi, situada al oeste de Bagdad, con aviones de combate que han logrado "abandonar a salvo las zonas atacadas".
Los milicianos de Estado Islámico han anunciado, por su parte, que han derribado un helicóptero de combate iraquí y que han muerto sus dos pilotos. Este ataque, el segundo de este tipo que realizan los milicianos en esta semana, aumenta la preocupación por su capacidad para derribar aeronaves a pesar de la operación militar estadounidense.
Dos fuentes gubernamentales iraquíes han informado de que los milicianos han empleado un lanzamisiles portátil para derribar el helicóptero Bell 407 que se ha estrellado al norte de Baiji. El pasado viernes también fue derribado un helicóptero Mi-35 en esa misma localidad.
Así las cosas, pese a que las ONG y los grupos de activistas han denunciado que los ataques de Estados Unidos en Irak han provocado bajas civiles, el Pentágono ha dicho que, según sus cálculos, no hay confirmada ninguna baja de este tipo.