NUEVA YORK, 2 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las principales agencias humanitarias de la ONU han pedido a la coalición militar liderada por Arabia Saudí que levante totalmente el bloqueo impuesto a los puertos yemeníes del Mar Rojo y han advertido de que de lo contrario tres millones de personas más sufrirán hambruna.
"Juntos pedimos a la coalición que abra urgentemente y por completo todos los puertos yemeníes del Mar Rojo y que facilite la entrada y el libre flujo de mercancías humanitarias y bienes comerciales vitales", han solicitado en un comunicado conjunto los máximos responsables de las principales organizaciones humanitarias del sistema de Naciones Unidas.
La ONU ha anunciado ya el envío de una delegación a Riad para tratar las prioridades de la coalición y de Arabia Saudí en cuanto a estos puertos, "pero necesitamos que la coalición otorgue urgentemente acceso sin impedimentos a las importaciones que son vitales para millones de personas".
Las organizaciones humanitarias de la ONU recuerdan que Yemen "está al borde de una de las hambrunas más importantes de los tiempos modernos". Casi 400.000 niños padecen malnutrición severo-aguda y corren peligro de muerte y más de ocho millones de personas podrían morir de hambre sin la ayuda alimentaria que pueda llegar del exterior.
Las agencias recuerdan que el 90 por ciento de los alimentos que se consumen en Yemen son importados, por lo que si no se permite la entrada de importaciones comerciales a través de los puertos del Mar Rojo, tres millones de personas más correrán peligro de morir de hambre. "La amenaza de una hambruna generalizada en cuestión de meses es muy real", advierten.
UNA CATÁSTROFE "COMPLETAMENTE EVITABLE"
"Esta catástrofe inminente es completamente evitable, pero es necesaria una acción inmediata de la coalición" saudí, señalan. Tres buques con alimentos han podido atracar en el puerto de Hudaida en los últimos días, pero cuatro buques cisterna y diez barcos con comida esperan el permiso de atraque, recuerdan.
Las mercancías que sí han entrado han permitido la reanudación de la actividad a las organizaciones humanitarias, pero "ante las gigantescas proporciones de la crisis humanitaria de Yemen, ello no sirve más que para ralentizar la barrena hacia una gigantesca tragedia humanitaria que costará millones de vidas", alertan.
Como ejemplo, las organizaciones de la ONU ponen el incremento del precio de la harina de trino en un 30 por ciento, que el precio del combustible se haya duplicado o que el agua que se vende en camiones cisterna se haya disparado en un 600 por ciento en ciertos puntos.
La falta de combustible ha paralizado las bombas de los pozos y once millones de personas de las grandes ciudades dependen del agua que llegue de fuera. Ello multiplica el riesgo de la proliferación de enfermedades relacionadas con el consumo de agua no potable o con la ausencia de un sistema de alcantarillado adecuado. Así, el brote de cólera que ya ha matado a más de 2.200 personas podría extenderse.
Los firmantes de la petición son el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus; el administrador del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), Achim Steiner; el el director ejecutivo del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), Anthony Lake; el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR), Filippo Grandi; el director ejecutivo del Programa Mundial de Alimentos (PMA), David Beasley; el director general de la Organización Internacional de las Migraciones (OIM), William Lacy Swing, y el subsecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios y Coordinador de Emergencias, Mark Lowcock.