TEHERAN, 23 Feb. (Reuters/EP) -
El presidente iraní, Mahmud Ahmadineyad, ha condenado este miércoles el uso de la fuerza contra los manifestantes que protestan en distintos países árabes y ha pedido a sus dirigentes que atiendan las demandas de éstos, obviando el uso de la fuerza que él mismo aplicó a las protestas contra su reelección en junio de 2009.
En sus primeras declaraciones sobre las revueltas populares que están viviendo varios países del norte de Africa y Oriente Próximo, Ahmadineyad se ha mostrado horrorizado por el uso excesivo de la fuerza y ha llamado a escuchar a los ciudadanos.
"¿Cómo puede un líder someter a su propio pueblo a una ducha de ametralladoras, tanques y bombas? ¿Cómo puede un líder bombardear a su propio pueblo y después decir 'mataré a quien diga algo'?", se ha preguntado, en declaraciones difundidas por la televisión.
"Yo quiero seriamente que todos los jefes de Estado presten atención a su pueblo y cooperen, se sienten y dialoguen, y escuchen sus palabras. ¿Por qué actúan tan mal que su pueblo necesita presionar para lograr reformas?", ha añadido.
Teherán ha dado la bienvenida a las protestas en Túnez y Egipto, que han traido consigo la salida de sus presidentes, considerando que se trata de un "despertar islámico" contra sus gobernantes autoritarios, como ocurrió en 1979 en Irán con la Revolución Islámica contra el sha.