NUEVA YORK, 23 Sep. (Reuters/EP) -
El presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, ha propuesto la reanudación del acuerdo de intercambio de combustible nuclear de 2009, comprometiéndose a reducir al 20 por ciento la producción de uranio enriquecido del país a cambio de combustible para un reactor médico.
"Siempre que nos den estas garantías, haremos nuestra parte y dejaremos el enriquecimiento a un 20 por ciento", ha dicho Ahmadineyad a la prensa en Nueva York, donde asiste a la reunión anual de la Asamblea General de Naciones Unidas.
En los últimos tiempos, Irán ha trasladado sus centrífugas de enriquecimiento de uranio a un búnker subterráneo cerca la ciudad santa de Qom para triplicar su producción. Analistas occidentales dicen que estos niveles permitirían al país conseguir la bomba atómica.
No obstante, el presidente ha advertido de que este eventual acuerdo no supone la paralización del programa nuclear iraní. "Continuaremos construyendo centrales", ha aseverado, indicando que el objetivo es satisfacer la demanda de electricidad del país. En total podría levantar 19 nuevas plantas.
Además, Ahmadineyad se ha referido a las sanciones impuestas por Naciones Unidas a Irán por su programa nuclear, reconociendo que han tenido un impacto negativo en la economía del país, el quinto exportador mundial de crudo.
"Al final, las sanciones tienen un efecto. Nunca mantuvimos que no hubiera habido ningún efecto", ha admitido, al tiempo que ha matizado que "no han tenido un efecto decisivo".
La Unión Europea y Estados Unidos también han sancionado a Irán por la sospecha de que su programa nuclear tiene por objetivo hacerse con la bomba atómica, algo que Teherán niega, asegurando que únicamente persigue fines pacíficos.