PEKÍN 23 Sep. (Reuters/EP) -
Más de 130 compañías chinas producen y exportan "instrumentos de tortura", que se venden normalmente a agencias de seguridad estatales, según ha denunciado este martes la organización por los Derechos Humanos Amnistía Internacional (AI).
"Mientras algunas exportaciones se usan sin duda en operaciones legítimas de las fuerzas de seguridad estatales, China también ha exportado equipos que tienen aplicaciones inhumanas y que tienen un riesgo potencial de facilitar que las autoridades policiales vulneren los Derechos Humanos en otros países", ha dicho.
Según ha informado la ONG en un comunicado, existen fotografías publicadas por medios de comunicación y obtenidas en Ghana, Senegal, Egipto y Madagascar en las que aparecen agentes de la Policía portando, supuestamente, porras eléctricas fabricadas en China.
AI ha trabajado con la Fundación británica de Investigación Omega, que investiga el comercio y uso de equipos militares, de seguridad y policiales. Ambas instituciones han concluido que "algunas de las armas y equipos manufacturados en China tienen efectos abusivos inherentes que son contrarios a los estándares internacionales de Derechos Humanos para las actuaciones de las autoridades policiales".
Además, de las 130 compañías que fabrican en la actualidad instrumentos de tortura en China --frente a las 28 que lo hacían hace una década--, la compañía Xining, que se presenta como fabricante de porras eléctricas, esposas de pulgares y sillas de retención, informó en 2012 de que tenía relaciones con más de 40 países africanos.
China, uno de los mayores inversores en África, aseguró en julio que más de la mitad de los 10.850 millones de euros destinados entre 2010 y 2012 a ayuda exterior fueron asignados al continente africano.
Finalmente, el Tribunal Supremo chino anunció en noviembre que prohibirá el uso de la tortura para obtener confesiones, en un país en el que los malos tratos y abusos por parte de los agentes sigue siendo un problema extendido.