Alemania afirma que la aplastante victoria del AKP en Turquía debe ser respetada

BERLÍN, 2 Nov. (Reuters/EP) -

El Gobierno de Alemania ha aplaudido este martes que las elecciones en Turquía transcurrieran de forma pacífica y ha recalcado que se debe respetar la aplastante victoria obtenida por el Partido Justicia y Desarrollo (AKP).

"Aplaudimos el hecho de que las elecciones parlamentarias de ayer fueran pacíficas", ha dicho el portavoz del Gobierno germano, Steffer Seibert. "Apuntamos el resultado de las elecciones con respeto", ha agregado.

Asimismo, ha destacado que Turquía debe ahora hacer frente a varios desafíos, entre ellos la lucha contra el grupo yihadista Estado Islámico, el conflicto con los kurdos y las consecuencias de la crisis en Siria, entre otros temas.

A falta de la publicación de resultados oficiales definitivos, el AKP ha obtenido, con un 95 por ciento de los votos escrutados, un 49,4 por ciento de los votos, lo que equivale a 316 escaños en el Parlamento, lejos de los 330 que le permitiría proponer de manera unilateral un referéndum constitucional y, por descontado, de los 367 que le concederían la posibilidad de introducir las enmiendas sin necesidad de plebiscito.

La segunda fuerza parlamentaria será el principal partido de oposición, el Partido Republicano del Pueblo (CHP) que preside Kemal Kiliçdaroglu y que ha conseguido un provisional 25,3 por ciento de los votos, es decir, 133 escaños.

Aunque los resultados del AKP y del CHP son similares a los registrados en las elecciones de junio, han resultado beneficiados por el descenso en votos para el partido islamonacionalista MHP de Devlet Bahçeli, que ha obtenido un 12 por ciento de los votos, traducibles a 42 escaños, lejos del 16 por ciento de las elecciones del verano.

Por último, y a pesar de que sus propios dirigentes han tachado el resultado de "decepcionante" a tenor de la inercia ganadora que parecían arrastrar desde hace meses, el prokurdo Partido Democrático de los Pueblos (HDP), que co-preside Selahattin Demirtas y que con el 10,4 por ciento de los votos no solo consigue representación parlamentaria, sino que se convierte en tercera fuerza con 59 escaños.