VIENA, 25 Nov. (Reuters/EP) -
Austria y Alemania han acordado reabrir una importante conexión ferroviaria que fue cerrada en septiembre para reducir el paso de decenas de miles de refugiados, aunque los pasajeros tendrán que someterse a los controles fronterizos, ha señalado la empresa operadora de los ferrocariles austriacos (OeBB).
Unas cifras más manejables en cuanto al flujo de inmigrantes y mejores sistemas de control han permitido reanudar el servicio interurbano entre la ciudad austriaca de Salzburgo y Múnich, en el sur de Alemania, ha señalado el portavoz.
A partir del viernes, los trenes volverán a circular desde Budapest y Viena hasta Múnich, aunque los pasajeros deberán hacer un transbordo en Salzburgo, donde las autoridades germanas efectuarán los controles pertinentes. De esta manera, los pasajeros deberán cambiarse a trenes locales para continuar su viaje hacia Alemania. "Veremos cómo funciona el servicio el viernes y si no se producen serios retrasos", ha explicado la OeBB.
En septiembre, los refugiados comenzaron a cruzar Austria desde la frontera húngara. Una vez en el país eran llevados hacia Salzburgo en trenes con dirección a Alemania, el destino preferente.
Desde entonces, la principal ruta de los refugiados a través de los Balcanes ha cambiado de Hungría a Eslovenia. Aquellos que consiguen llegar a Austria son trasladados en autobús a lo largo del país, propagando el número de cruces hacia Alemania --lo que ha convertido Salzburgo en un punto menos concurrido--. Sin embargo, una portavoz de la Policía local ha señalado que el número de llegadas a esta ciudad apenas ha disminuido en las últimas semanas, solo el miércoles llegaron 600 personas.
Cientos de miles de personas huyen de la guerra y la pobreza en Oriente Próximo y Afganistán. Alemania es el destino principal de los refugiados que llegan a Europa.