BERLÍN, 29 Nov. (DPA/EP) -
Los últimos soldados de las Fuerzas Armadas de Alemania estarán fuera de Malí para mediados de diciembre tras diez años de misión, tal y como ha confirmado este miércoles ante el Parlamento el ministro de Defensa, Boris Pistorius.
Estos últimos diez años, un contingente de la Bundeswehr ha estado colaborando con la misión de paz de Naciones Unidas en Malí, la MINUSMA, cuya relación con las autoridades se ha estado deteriorando desde la irrupción de la junta militar.
"La situación se está volviendo más volátil, más peligrosa", ha explicado Pistorius, quien semanas atrás ya apuntó que "debido al comportamiento" de la junta militar de Malí, continuar con la misión como hasta ahora ya no tenía sentido.
Preguntado en el Parlamento sobre los logros de la presencia de la Bundeswehr en Malí, con un gasto de 4.300 millones de euros y la muerte de tres soldados alemanes, Pistorius ha reconocido que es "difícil" saberlo, pero está convencido que la misión tuvo una "influencia tranquilizadora" en el país africano.
"Cuando se trata de apoyar a países de esta región, el éxito no se mide en euros, sino en términos políticos", ha respondido a las preguntas de la oposición. Ha añadido que han sido meses muy difíciles desde que Malí pilló a todos por sorpresa con las "repentinas" demandas de expulsión.
"Hemos ajustado inmediatamente nuestros planes como consecuencia de ello y probablemente terminaremos con el redespliegue, con la retirada de nuestro contingente, incluido el material, a mediados de diciembre", ha confiado.
A mediados de junio, el la junta militar de Malí reclamó la retirada de los 12.000 soldados de la MINUSMA, al tiempo que estrechaba sus lazos de cooperación con Rusia, en especial con el grupo de mercenarios Wagner. Una situación que se ha repetida en otros países de la región como Níger.
Actualmente, quedan en Malí unos 1.100 soldados alemanes, la mayoría de ellos estacionados en Gao, en el noreste del país. Su retirada se ha visto también dificultada tras el golpe militar en el vecino Níger, donde mantiene una base de transporte aéreo a las afueras de la capital, Niamey.