MADRID, 14 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno de Alemania y el Fondo para la Infancia de Naciones Unidas (UNICEF) han firmado un acuerdo de colaboración para mejorar el cuidado y la protección de los 300.000 niños refugiados que han llegado en 2015 al país, según ha informado este lunes la organización.
"Allí donde haya niños, adolescentes y mujeres, se tienen que tomar medidas para protegerles de agresiones y violencia sexual, incluyendo abusos sexuales y acoso", ha afirmado la ministra alemana de Familia, Manuela Schwesig.
La ministra ha explicado que el acuerdo responde a la necesidad de llevar a cabo medidas necesarias en materia de infraestructura, información, sensibilización y formación para personal y voluntarios.
"Compartimos con Alemania el mismo objetivo de proteger a los niños más vulnerables, independientemente de donde vengan", ha asegurado la coordinadora especial de UNICEF para la crisis de migrantes y refugiados en Europa, Marie Pierre Poirier, quien ha recordado que los solicitantes de asilo han soportado guerras, persecución y terribles viajes.
Un análisis elaborado de forma conjunta entre las dos partes revela que "la envergadura de la crisis ha sobrecargado el sistema de bienestar alemán" y ha dejado a los menores en riesgo.
El informe también muestra que los niños y las mujeres son más vulnerables a la violencia, el abuso y la explotación, especialmente en los centros temporales de recepción y alojamiento. La ONU ha explicado que en estos centros los menores a menudo carecen de acceso a una escolarización adecuada, apoyo psicosocial o actividades recreativas durante meses.
Entre las tareas que el Ejecutivo alemán y UNICEF desarrollarán con ONG alemanas se encuentran ayudar a identificar niños en riesgo, aumentar el acceso a los servicios y asesoramiento, la formación de trabajadores de prevenir abusos y violencia o mejorar los sistemas de recogida de datos.
MUCHOS VOLUNTARIOS, POCAS NORMAS
"Después de una huida larga, y a menudo peligrosa, los niños refugiados en Alemania están en un lugar relativamente seguro. Pero sus condiciones de vida en centros de alojamiento como pabellones deportivos, antiguos cuarteles militares u otros alojamientos temporales, serán más duras con el paso del tiempo", ha alertado el director ejecutivo del Comité Nacional de UNICEF en Alemania, Christian Schneider.
"Hay un gran número de personal y voluntarios que están haciendo un gran trabajo. Sin embargo, no hay normativas vinculantes para la protección de la infancia, ni suficientes oportunidades para la atención psicosocial, el aprendizaje y el juego", ha lamentado Schneider.
UNICEF también proporciona agua, saneamiento, protección infantil y educación a los niños afectados por el conflicto en sus países de origen y a los varados en los Balcanes. El Gobierno alemán ha aportado 250 millones de euros a la agencia de la ONU en 2015 --100 millones de euros más que en 2014-- para los millones de niños atrapados en las guerras en Afganistán, Irak, Libia, Siria, Ucrania y Yemen, y los refugiados en Jordania, Líbano y Turquía.