MADRID, 22 May. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de 200 palestinos encarcelados en Israel se han unido este domingo a la huelga de hambre declarada por otros 1.300 reos, según ha informado el comité que informa sobre la protesta.
Según estas informaciones, recogidas por la agencia oficial palestina de noticias, WAFA, la decisión ha sido adoptada después de que los Servicios de Prisiones de Israel se hayan negado a negociar sobre las demandas de los presos.
Durante la jornada, decenas de reos en huelga de hambre han sido hospitalizados en las localidades de Holon y Afula, tras más de un mes de protesta, tal y como ha informado el diario local 'Yedioth Ahronoth'.
El coordinador especial de Naciones Unidas para el Proceso de Paz en Oriente Próximo, Nickolay Mladenov, reclamó el jueves una solución "inmediata" a la huelga de hambre de presos en cárceles de Israel.
"Estoy siguiendo con gran preocupación la huelga de hambre de detenidos palestinos que protestan contra sus condiciones (de encarcelamiento) en cárceles de Israel", dijo en su comunicado.
Así, subrayó que "la huelga está entrando en su segundo mes, por lo que es imperativo que se encuentra una solución lo antes posible, en línea con el Derecho Humanitario y las obligaciones de Israel a nivel de Derechos Humanos".
Mladenov manifestó que encontrar una solución a la situación "va a favor de los intereses de las iniciativas en marcha para relanzar el proceso de paz", solicitando a las partes que ejerzan "la máxima contención" y que "muestren responsabilidad"
El relator especial de Naciones Unidas sobre la situación de los Derechos Humanos en los Territorios Palestinos Ocupados, Michael Lynk, reclamó el martes a Israel que cumpla el Derecho Internacional respecto a las detenciones de presos.
"El uso por parte de Israel de la detención administrativa no cumple con las circunstancias extremadamente limitadas que contempla el Derecho Humanitario, y priva a los detenidos de las salvaguardias legales básicas garantizadas por éste", argumentó.
La detención administrativa es una figura que permite a las autoridades israelíes mantener bajo custodia indefinidamente a un sospechoso sin presentar cargos ni iniciar un proceso judicial.
En este sentido, Lynk señaló que cerca de 500 de los 6.000 presos palestinos en Israel lo están en situación de administrativa, recalcando además que "muchos" del total están encarcelados en Israel, y no en los Territorios Palestinos Ocupados, contraviniendo el Derecho Internacional.
Lynk expresó además su preocupación por las informaciones sobre el encarcelamiento en aislamiento de presos que participan en la huelga de hambre, así como por la negativa a que reciban visitas de abogados.
"Los prisioneros en todas partes tienen derecho a participar en huelgas de hambre para protestar por sus condiciones de vida, y no deben ser castigados por ello", recalcó, alertando de que "la alimentación forzosa es una práctica que, según expertos en Derechos Humanos, podría equivaler a la tortura".
Ahora mismo se estima que unos 1.300 de los 6.300 presos palestinos en Israel se han sumado a la huelga para denunciar "torturas, maltrato y negligencias médicas" en las cárceles israelíes, así como abusos del Gobierno israelí a la hora de recurrir a la llamada detención administrativa.