MADRID, 12 May. (EUROPA PRESS) -
El Alto Representante para Bosnia y Herzegovina, Christian Schmidt, ha exigido a la comunidad internacional ante el Consejo de Seguridad la defensa de los Acuerdos de Dayton en el marco de las recientes tensiones debido a la posible retirada de la República Srpska de las fuerzas unificadas.
La República Srpska es una de las dos entidades que conforman Bosnia y Herzegovina, junto con la Federación bosniaco-croata. Por encima de las dos entidades se sitúa un Gobierno central bosnio con pocas competencias, liderado por una Presidencia con representantes de los tres grupos principales del país, los serbobosnios, los musulmanes bosnios (bosniacos) y los bosniocroatas.
Al describir los principales desafíos que enfrenta el país ante el Consejo de Seguridad, Schmidt ha señalado que existe una retórica que "podría socavar el marco constitucional, incluidos los intentos de hacer inaplicables las leyes estatales", de cara a las elecciones, previstas para el 2 de octubre.
"El conflicto en Ucrania, no muy lejano, es un recordatorio aleccionador de que incluso en el siglo XXI, otra guerra en suelo europeo no es imposible", ha advertido, agregando que "Bosnia y Herzegovina sigue siendo un país traumatizado por la guerra".
Schmidt también ha resaltado que "nos quedaremos quietos mientras otros tratan de desmantelar 26 años de paz, estabilidad y progreso" y ha elogiado, además, a aquellos gobiernos que han apoyado la unidad de Bosnia y Herzegovina a través de sanciones.
"Con respecto a la candidatura de Bosnia y Herzegovina para ser miembro de la Unión Europea, un camino que ayudaría a resolver los agravios y promover la paz, insto a Europa a mantener sus puertas abiertas y al resto de las naciones de los Balcanes Occidentales", ha agregado.
El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, quien ha pedido este mismo miércoles a los líderes de los países de los Balcanes trabajar juntos para evitar que Rusia "explote las debilidades" de la región, ha expresado su preocupación después de que las autoridades serbobosnias afirmaran su deseo de retirarse de las instituciones compartidas.
Sobre la situación que atraviesa el país, el responsable de Exteriores de la UE ha insistido en que "no puede haber espacio para socavar la soberanía, la unidad e integridad territorial de Bosnia" y ha señalado que será "muy franco" con el miembro serbio de la presidencia de Bosnia y Herzegovina, Milorad Dodik, sobre esto.
Las elecciones en el país están programadas para el próximo 2 de octubre. Los acuerdos de Dayton de 1995 pusieron fin a la guerra en el país, con graves divisiones étnicas que han provocado un bloqueo institucional y que amenazan con la desintegración del país.
Dodik, partidario de la secesión de la región dominada por los serbios, anunció el pasado año que la región serbobosnia se retiraría de todas las instituciones estatales, incluidas las Fuerzas Armadas y los principales órganos judiciales y fiscales, y formaría las suyas propias.
Schmidt ya alertó en noviembre de 2021 de que Bosnia Herzegovina corre peligro de desintegrarse si la comunidad serbia sigue adelante con esta amenaza y de que existe un "riesgo real" de un nuevo conflicto que podría sumarse, ahora, al que ya hay abierto en Ucrania.