MADRID, 20 Jul. (EUROPA PRESS) -
La Asociación Marroquí de Derechos Humanos (AMDH) en la ciudad marroquí de Nador ha insistido este miércoles en cifrar en al menos 27 los muertos en el intento del salto a la valla de Melilla del pasado 24 de junio, donde según el balance oficial perdieron la vida 23 personas.
La ONG ha celebrado una rueda de prensa donde ha añadido que aún a día de hoy, cuando casi se cumple un mes de lo ocurrido, todavía hay al menos 64 personas desaparecidas. La cifra de heridos asciende a más de 110 entre migrantes y agentes de las autoridades marroquíes.
Asimismo, AMDH-Nador ha recriminado que las autoridades marroquíes llegaron incluso a cavar fosas comunes para los fallecidos, si bien la voz de alerta dada por la misma organización, que incluso llegó a publicar fotografías de las excavaciones, frenó finalmente este proceso.
Por otro lado, representantes de la organización han denunciado la intervención de los agentes de seguridad de Marruecos, que rodearon a los migrantes, impidiéndoles la posibilidad de retroceder y regresar a sus campamentos.
En este sentido, AMDH-Nador ha alertado sobre el "uso excesivo de gases lacrimógenos" tanto por parte de las autoridades marroquíes como de las españolas, algo que sumado al cerco que se hizo de los migrantes, consideran que influyó en el trágico desenlace del episodio.
A su crítica a la intervención de las fuerzas de seguridad de Marruecos, la ONG ha aludido también a las de España para que den pasos orientados hacia el esclarecimiento de lo ocurrido, cumpliendo así con su posición de transparencia al respecto.
"Las autoridades de Melilla, si dicen que son transparentes, deben revelar los datos de las cámaras de vigilancia y del helicóptero que sobrevoló la zona", han trasladado desde la organización.
Finalmente, AMDH-Nador ha descartado que el asalto a la valla se produjese auspiciado por una red de tráfico de personas, pues consideran que estas centran su negocio por vía marítima, una alternativa alimentada especialmente desde que en 2017 se reforzara la valla.
"La reorientación de la migración de subsaharianos hacia la vía marítima, controlada por las redes de traficantes (...) fue solo consecuencia de las políticas migratorias europeas y marroquíes que, al hacer la barrera casi infranqueable, han favorecido sobre todo el establecimiento de una mercado migratorio bajo el control de las redes de tráfico", ha concluido la ONG.
Ya la pasada semana, el Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH), una comisión dependiente del Gobierno de Marruecos, cuestionó el papel de las autoridades españolas tras el intento masivo de más de 2.000 subsaharianos de cruzar la valla de Melilla
El CNDH indicó que los hechos de violencia tuvieron lugar debido a la inacción de las autoridades españolas "a pesar de los empujones y enganches de migrantes frente a las puertas que permanecían herméticamente cerradas" y cuya consecuencia "más probable" fue la de "aumentar el número de muertos y heridos".