Amnistía acusa de asesinatos, detenciones arbitrarias de migrantes y torturas a una milicia progubernamental de Libia

La ONG lamenta que "la impunidad arraigada ha envalentonado" a la SSA, financiada por el Estado libio

MADRID, 4 May. (EUROPA PRESS) -

La organización no gubernamental Amnistía Internacional ha acusado este miércoles a la milicia progubernamental libia Autoridad de Apoyo a la Estabilidad (SSA) de cometer asesinatos, detenciones arbitrarias de migrantes y torturas en la capital del país africano, Trípoli.

"La impunidad arraigada ha envalentonado a la milicia SSA, financiada por el Estado, a cometer homicidios ilegítimos, detenciones arbitrarias, interceptación y posterior detención arbitraria de personas migrantes y refugiadas, tortura, trabajos forzados y otras violaciones terribles de derechos humanos y crímenes de derecho internacional", ha dicho la ONG.

La milicia, creada a través de un decreto gubernamental aprobado en enero de 2021, está liderada por Abdelghani al Kikli, alias 'Gheniua', quien fue puesto al frente de la misma pese a las acusaciones contra él por crímenes contra el Derecho Internacional y violaciones de los Derechos Humanos.

"Legitimar a líderes de milicias que cometen abusos y ponerlos a sueldo del Estado sin hacer preguntas sólo los empodera para seguir pisoteando los derechos de más personas con total impunidad", ha dicho la directora adjunta de Amnistía Internacional para Oriente Próximo y Norte de África, Diana Eltahawy.

"No sorprende, pues, que la nueva milicia de Abdelghani al Kikli esté implicada una vez más en crímenes terribles sea contra personas migrantes y refugiadas o contra la propia población libia", ha agregado.

En este sentido, Eltahawy ha subrayado que "hace más de una década que las milicias bajo su mando aterrorizan a quienes viven en el barrio de Abu Salim de Trípoli con desapariciones forzadas, torturas, homicidios ilegítimos y otros crímenes bajo el Derecho Internacional".

"Debería ser investigado y, si hay pruebas admisibles suficientes, procesado en un juicio justo", ha manifestado. La ONG escribió en abril a las autoridades libias para comunicar las denuncias recibidas contra Al Kikli y su antiguo 'número dos', Lofti al Harari, y reclamar su cese mientras se llevan a cabo investigaciones en torno a estas acusaciones.

Así, la ONG ha desvelado que una delegación de Amnistía Internacional visitó el país en febrero y habló con nueve personas que denunciaron haber sufrido violaciones graves a manos de miembros de la SSA, así como con ocho familiares de las víctimas y tres activistas.

ABUSOS CONTRA MIGRANTES

Amnistía Internacional ha revelado que representantes del Ministerio del Interior confirmaron que la SSA está encargada de interceptar a refugiados y migrantes en el mar y de trasladarlos a centros de detención bajo control de la milicia, sin que el Gobierno supervise debido a que depende de la oficina del primer ministro de unidad, Abdul Hamid Dbeibé.

Un total de tres migrantes entrevistados por Amnistía han relatado que fueron recluidos junto a cientos de personas más en febrero de 2022 en un centro de detención en Al Mayá que estaba masificado y mal ventilado, donde les dieron poca comida y agua y se vieron obligados a beber de las letrinas.

Asimismo, han contado que habían presenciado cómo varios guardias golpeaban habitualmente a migrantes y refugiados detenidos en el centro, donde además eran sometidos a trabajos forzosos, violaciones y otros actos de violencia sexual, incluida prostitución forzada.

La SSA, que no ha facilitado información sobre el número de personas recluidas en este centro ni permite el acceso a organizaciones independientes, lleva a cabo interceptaciones en el mar desde septiembre de 2021, incidentes que han causado muertes en el mar Mediterráneo por la violencia empleada.

"La detención arbitraria masiva, la tortura, los trabajos forzados, la violación y otras terribles violaciones de derechos a manos de milicianos de la SSA contra personas refugiadas y migrantes son otro triste recordatorio más de que las personas refugiadas y migrantes interceptadas en el mar no deben ser devueltas nunca a Libia", ha recalcado Eltahawy.

"La UE y sus estados miembro deben suspender urgentemente toda cooperación con Libia en materia de migración y control de fronteras, y garantizar que cualquier cooperación en el futuro está supeditada a que las autoridades libias pongan fin a la política de detención arbitraria de personas migrantes y refugiadas, e investiguen efectivamente los abusos que se cometen contra ellas", ha argüido.

DESAPARICIONES FORZOSAS Y VIOLENCIA SEXUAL

Por otra parte, la ONG ha asegurado que ha documentado crímenes recientes que incluyen desapariciones forzosas y muertes bajo custodia a manos de milicianos de la SSA, incluido el asesinato en agosto de 2021 de un hombre que fue torturado tras haber sido secuestrado días antes por este grupo armado.

Así, durante los últimos diez años, tanto Amnistía Internacional como otras organizaciones han documentado desapariciones forzosas, detenciones arbitrarias, torturas, asesinatos y otros crímenes por parte de la milicia Fuerzas de Seguridad Central-Abú Salim y su predecesora, el Consejo Militar Abú Salim, bajo el mando de 'Ghenuia' y Al Harari.

En este sentido, seis personas recluidas entre 2016 y 2019 en un centro de detención bajo responsabilidad entonces de las Fuerzas de Seguridad Central-Abú Salim, han denunciado ejecuciones simuladas, privación de alimentos, palizas, descargas eléctricas, violencia sexual y denegación de atención médica bajo custodia.

Un hombre detenido entre mayo y octubre de 2018 ha relatado que fue golpeado de forma habitual con tuberías de agua, palos y culatas de fusil y ha agregado que el propio Al Harari le agredió, amenazó con violarlo y abrió fuego contra él con munición real.

Otro detenido en esta misma época ha subrayado que Al Hariri le ordenó a él y otros detenidos que permanecieran de pie contra una pared y luego les había tiroteado, hiriendo a algunos de ellos en las extremidades. Las familias de ocho hombres dijeron a Amnistía Internacional que las Fuerzas de Seguridad Central-Abú Salim habían secuestrado y detenido a sus seres queridos entre 2017 y 2022, sin que se haya esclarecido el paradero de algunos de ellos.