MADRID, 10 Jun. (EUROPA PRESS) -
La organización no gubernamental Amnistía Internacional (AI) ha afirmado este viernes que el Ejército de Nigeria mató a al menos 17 personas desarmadas durante una manifestación convocada por grupos secesionistas de Biafra a finales de mayo.
La ONG, que ha señalado que en algunos casos podría hablarse de "ejecuciones extrajudiciales", han reclamado una investigación "urgente e independiente", agregando que los responsables "deben ser llevados ante la justicia".
En su comunicado, ha señalado que el número exacto de víctimas mortales es desconocido, apuntando que el Ejército trasladó los cadáveres y a varios heridos, si bien ha manifestado que ha recibido informaciones que apuntan a que podría haber hasta 40 muertos.
Así, ha recalcado que su investigación preliminar, realizada tras visitar hospitales y morgue, ha podido confirmar que la actuación del Ejército se saldó con 17 seguidores del Pueblo Indígena de Biafra (IPOB) muertos y 50 heridos, reconociendo que el número real "probablemente sea más alto".
La ONG ha puntualizado además que algunos de los muertos y heridos presentaban heridas de bala en la espalda, lo que indica que fueron tiroteados cuando intentaban escapar del lugar.
El Ejército justificó su actuación argumentando que recurrió a la defensa propia y recalcando que los manifestantes mataron a dos soldados, lo que AI no ha podido confirmar durante sus investigaciones.
Por contra, la ONG ha recalcado que, en caso de que eso fuera cierto, "esas muertes no respaldarían el argumento de que se actuó en defensa propia", añadiendo que "no hay pruebas de que las muertes (de manifestantes) fueran necesarias para proteger vidas".
"No es la primera vez que mueren miembros del IPOB a manos del Ejército. Se está convirtiendo en un patrón preocupante y este incidente, como los otros, debe ser investigado inmediatamente", ha valorado el director de AI en Nigeria, M.K. Ibrahim.
"Además, se debe poner fin al patrón de militarización de las operaciones de control de masas, ya que se despliega habitualmente a los soldados para llevar a cabo funciones policiales", ha remachado.
Biafra fue escenario de un sangriento conflicto entre separatistas y tropas federales entre 1967 y 1970, que provocó la muerte de cerca de un millón de personas, en gran parte civiles, a causa de la violencia, el hambre y las enfermedades.